Las pomadas antiinflamatorias, un remedio eficaz a tener en cuenta
Tanto en el trabajo, como haciendo deporte o en accidentes caseros, las lesiones y torceduras son una de las afecciones más comunes entre la población independientemente de la edad o del género. Niños, adultos y personas mayores sufren de zonas inflamadas en su cuerpo con tanta frecuencia que el consumo de productos antiinflamatorios es uno de los consumos de medicamentos más elevados del mundo.
Aunque los productos principales que se suelen usar ante la inflamación de alguna zona dañada del cuerpo suelen ser comprimidos o medicamentos en sobres para su disolución en agua, lo cierto es que existe un remedio que además de ser efectivo frente a la inflamación por su propia composición también es muy útil para relajar la zona afectada con un ligero masaje: hablamos de las pomadas y aceites antiinflamatorios.
Las pomadas antiinflamatorias son un producto cada vez más extendido y es que su aplicación es muy rápida y el alivio de los síntomas se produce de manera local en la zona afectada por la inflamación, por lo que evita que el producto afecte a otras zonas del organismo. Estas pomadas pueden ser tanto de elementos químicos y farmacéuticos como elaboradas con productos de origen natural, en cualquier caso su efectividad está fuera de toda duda y a día de hoy existe una gran variedad en el mercado entre las que poder elegir la más adecuada para cada caso.
¿Por qué elegir una pomada frente a otra solución?
Las pomadas tienen varias ventajas respecto a la ingesta de antiinflamatorios por vía oral. En primer lugar son muy recomendables por consiguen con la menor dosis posible un alivio sintomático de la inflamación en la zona concreta donde se aplique. Este tipo de pomadas suelen tener algún efecto a nivel térmico que incrementa su eficacia y el alivio se comienza a notar pocos minutos después de su aplicación, motivo por el cual tiene gran éxito entre los deportistas de cualquier disciplina.
En segundo lugar, las pomadas antiinflamatorias son perfectas para aquellas personas que sufran de otras afecciones a nivel de salud como la hipertensión, la insuficiencia renal o las úlceras en el estómago, ya que el consumo de antiinflamatorios vía oral perjudica estas afecciones. Con la aplicación de una pomada antiinflamatoria se limita el efecto a la zona dolorida a través de un ligero masaje hasta su absorción, por lo que los efectos secundarios se reducen en gran medida.
En cualquier caso existen efectos secundarios en pomadas como la pomada de arnica montana. Los efectos secundarios del aceite de arnica pueden llegar a ser molestos para cierto tipo de personas y por ello es conveniente conocerlos previamente, por lo que presta atención a las contraindicaciones de arnica para evitar sufrir algunas de sus consecuencias.
En tercer y último lugar, las pomadas antiinflamatorias son de una rápida absorción y de un tacto agradable, por lo que son perfectas incluso para aquellas personas que no son muy dadas a usar pomadas como remedio para cualquier afección. Y es que las pomadas o aceites antiinflamatorios tan solo necesitan de un masaje ligero en la zona afectada para que el producto se absorba y comience a hacer efecto, por lo que la rapidez atrae a muchas personas a este tipo de productos antiinflamatorios.
Productos usados en las pomadas antiinflamatorias
En la actualidad podemos encontrar pomadas antiinflamatorias con las mismas propiedades químicas que cualquier antiinflamatorio convencional que se administre por vía oral. Existen pomadas con ibuprofeno en su composición para aliviar el dolor y por supuesto con los mismos componentes antiinflamatorios. Además, muchas de estas pomadas incorporan una sensación de frío-calor que ayuda a relajar la zona muscular afectada y que alivia en cierta medida el dolor.
Otras pomadas con gran éxito optan por incorporar antiinflamatorios de origen natural para complementar su efecto y para añadirle un toque de perfume a la crema. Productos como la arnica son muy usados en las pomadas antiinflamatorias, al igual que otras plantas y productos naturales como la cúrcuma o el laurel entre otros muchos.
Como se puede apreciar, el éxito de las pomadas antiinflamatorias frente a otras opciones existentes en el mercado tiene diferentes orígenes. En cualquier caso es un producto muy versátil, fácil de transportar en cualquier bolsillo y fácil de aplicar, por lo que sin duda seguirá estando presente entre nosotros muchos años más.
