ÚLTIMA HORA

SOBRE LOS SIETE ERRORES MORALES GRAVES, I

                         0. Hay temas hoy, que no se pueden tocar, se habla mucho de la liberación y libertad sexual, pero si alguien plantea, que quizás algunas concepciones o prácticas sexuales no son correctas, no se permiten esa opinión. Aquí, en este artículo y en los que se construyan sobre este tema, no hablaremos de ninguna práctica sexual, pero si de la cuestión general o profunda, de lo que durante siglos se ha denominado lujuria, que sería el uso desordenado de la sexualidad, igual que la avaricia sería el uso desordenado de la necesidad de adquirir bienes de fortuna.

                        De todas formas, este tema es tan complejo, que se escriba lo que se redacte, siempre estará mal, y más en la época que nos ha tocado vivir-existir. Sin negar que los errores conceptuales que pueda tener el escribano de este artículo sobre esta cuestión y sobre otras mil. Antiguamente, durante siglos se ha denominado siete pecados capitales (lujuria, avaricia, ira-cólera, envidia, vanidad-vanagloria-soberbia, acidia-pereza, gula), porque son errores morales que son cabeza de otros tantos. Hoy podríamos denominarlos siete errores morales graves.

                        1. Sobre la lujuria. No estamos planteando perseguir a nadie por sus prácticas sexuales, siempre que estén dentro de la legalidad vigente, siempre que estén dentro del marco de la ética y moralidad, al menos mínima, y si es posible de una espiritualidad-religiosidad suficiente y racional y moral. Pero no cabe duda que una sexualidad incorrecta, a nivel teórico y práctico, trae al ser humano, en primer lugar, al actor primero, enormes problemas, y después, a otras personas, cercanas o menos cercanas. Además, que siempre la sexualidad, por lo general, existen no uno, sino varios actores o agentes de los hechos o actos.

                        2. No estamos planteando volver a concepciones de hace diez siglos, pero si, retomar de la tradición de siglos lo bueno, y analizar, si muchas concepciones prácticas actuales, que ya estaban descubiertas en el pasado, son correctas. Pero incluso se pueden pensar que son incorrectas, pero la sociedad, por unos motivos y otros, cree que hay que permitirla. Nadie acepta que la prostitución sea correcta y buena y adecuada, pero todo el mundo acepta, que hay que tolerarla, por multitud de razones.

                        3. Un ser humano que se autocontrola en la sexualidad, de forma correcta y adecuada, teniendo en cuenta su edad y su estado, no es lo mismo, sea célibe o sea casado o sea viuda o sea niño o sea anciano, controlará en muchos sentidos otras dimensiones de su realidad, de su lengua, de sus deseos, de sus miradas, de sus palabras. De alguna manera, no será un peligro potencial para otras personas, sean hombres o sean mujeres. Y esto le puede abrir muchas puertas, y no cerrarles, otras muchas.

                        Al ser capaz de organizar de forma correcta su fuerza sexual, podrá dedicar ese tiempo, ese esfuerzo, ese espacio de fuerzas, ese dinero a otras actividades, que sean buenas y correctas, incluso para perfeccionarse en ese aspecto de la realidad y en otros… Mientras, estás viendo una película porno, que no te lleva a ningún sitio, puedes estar trabajando y produciendo algo, viendo un documental que te enseñe algo, dedicarte a tus hijos, leer una cosa correcta que aprendas algo, o incluso descansar una pequeña siesta…

                        4. En una cultura-sociedad que casi todo está orientado hacia el disfrute-placer, especialmente la sensualidad y lo sensual, es muy difícil que unas personas y colectivos, no caigan en un placer desordenado y otras, caigan en otros.

                        5. Todo error moral grave, es porque un acto-hábito está desorganizado-desestructurado-desequilibrado, tanto por exceso o por defecto, o según las circunstancias-situación-concreción de y en la realidad.

                        6. Vivimos en una oleada-mar-época llena de materialismo-hedonismo-relativismo-escepticismo ético y moral, por lo cual, la mayoría de individuos y colectivos, defienden estos valores, aunque no lo sepan. Diríamos que los fundamentos-principios de todo son estos. Incluso en los que dicen no admitirlos. Y esta es la grave enfermedad de nuestra época y tiempo, al menos en Occidente y al menos en Europa y al menos en Hispania. Y esto crea enormes males-sufrimientos-penas-angustias, pero la inmensa mayoría de seres humanos, los padecen, pero no son conscientes de ello y de ellos. Y muchos, mucho tanto por ciento, tampoco quieren darse cuenta de ello, creen que la vida es eso, es decir, epicureísmo-hedonismo-materialismo-relativismo-escepticismo ético y moral. Cada uno en su modo o forma, cada uno en su combinación…

                        Como esa es la filosofía-metafísica de fondo, después cada uno lo concretiza o cae, en un error-desvirtud-vicio-pasión no equilibrada o desenfrenada. En uno o en dos o en tres… Y eso lo va repitiendo durante toda su existencia-vivencia hasta que el cuerpo o la salud no aguante.

                        Hoy, todo el mundo habla de salud física, salud estética, de salud de la boca, de salud de mil modos, pero pocos se plantean de la salud ética y moral, mínima. Menos aún de la salud espiritual o religiosa…

                        Así unos caemos en uno o en varios errores o hábitos negativos, y otros en otros. Así en la época de más libertad y derechos y posibilidades en tantos sentidos, la mayoría de seres humanos, familias, entidades de todo tipo, viven y existen con una enorme cantidad de sufrimiento y angustia innecesaria… Pero esto hoy ni se puede decir, menos aún plantear, menos escribir, menos pensar, porque si lo haces te cierran todas las puertas de la cultura. Cada uno critica, a los otros, lo que su pensar o ideología percibe como malo o negativo, unos la avaricia, otros la lujuria, aquellos la pereza, pero no en los errores que cada uno, de nosotros caemos, o nuestras familias, o nuestras entidades ideológicas…

                        7. La gran pregunta, es si conviene que los humanes, unos caigan en un error moral y ético, otros en otro, para de ese modo gestionar mejor sus vidas. Se dirigen desde dentro, creando errores morales desde fuera.

                        ¿O dicho de otro modo, se le llena a los humanes de pasiones-deseos-pulsiones no controlados, no armonizados, para de ese modo, sean títeres en manos de unos y de otros?

                        8. El que escribe esto, el que piensa esto, es decir, sobre los errores morales graves, sobre los llamados durante siglos pecados capitales, no es perfecto, pero al menos, el que describe esto, entiende que estos errores morales graves, son errores. No justifica lo negro porque él sea o tenga actuaciones grises…

                        Este es el problema de ahora, nuestros defectos prácticos, los justificamos como aciertos conceptuales. Ni siquiera aceptamos los errores teóricos y conceptuales que tenemos, que además, después, pueden ser también prácticos o de actuaciones…

                        Ciertamente uno se encuentra en esta lucha muy en soledad. Porque el estamento religioso y eclesiástico, lo expresan en sus sermones, pero diríamos no llegan a y en los medios de comunicación normales. Cosa que invito aquí, existen todavía miles de presbíteros, religiosos, religiosas. Podrían escribir y redactar artículos literarios, cuentos, poemas, relatos, y multitud de otros géneros, combinando su filosofía, su religiosidad y el arte concreto… Y así, de ese modo, podrían llegar sus obras a miles de personas… Uno de los errores del cristianismo occidental, es que ha dejado u olvidado el tren del gran arte plástico, de la gran literatura, de las demás artes. Y deben intentarlo volver a subirse en él. En la medida que puedan.

                        El cristianismo tienen que combatir lo que denominan errores morales graves, con la gran literatura y el gran arte y la gran filosofía, como han hecho durante siglos. Y hoy, existen multitud de medios. Ellos tendrían páginas de sus parroquias, de sus institutos religiosos, etc.

                        9. No soy un ignorante e ingenuo completo, sé que por escribir de estos temas morales, por muy cuidadoso que sea, por muy respetuoso que sea, muchas personas que puedan acercarse a estos textos y a otros, rechazarán estas frases-ideas-conceptos, y desde luego al escribidor-pensador-autor que puede estar detrás…

                        Pero creo que todo escritor-pensador-filósofo, sea de primera categoría o sea décima, como parece ser que soy yo, tiene que tener un grado suficiente de libertad de observación y de pensamiento, e ir a buscar la verdad dónde crea que está, y no dónde a él o a ella le convengan, según sus vivencias-traumas-heridas-endoculturación-intereses. Por eso, hay pocos intelectuales de verdad en el mundo. La mayoría no ven lo que existe, sino lo que quieren ver. Ni yo tampoco, pero al menos, yo lo intento…

                        10. Vivimos tiempos de una enorme libertad, y esto es una gran conquista humana y social. Pero también, vivimos tiempos de una enorme amoralidad-antimoralidad-inmoralidad. Y esto también hay que decirlo. Lamento escribirlo. Porque me gustaría que usted me quisiese un poco, y quizás con estas palabras, aún más me rechazará. Pero creo que el cirujano por mucho que le aprecie a usted, no puede decir, que no le pasa nada o es cosa menor, siendo quizás un cáncer de muy difícil solución. Sería engañarle a usted y a la sociedad. Otra cosa es que se equivoque. Me temo, que en un tiempo, de enorme libertad, incluso de una enorme moralidad correcta jurídica, a nivel personal e individual hemos caíd en una enorme inmoralidad. Unos, hemos caído en unos temas, otros en otros, pero entre todos hacen y hacemos la vida muy difícil, a uno mismo y a los cercanos y a los demás.

                        No critico a nadie concreto, solo hablo en general, cada uno tome lo que quiera. Paz y pan y bien para todos y cada uno de los seres humanos.

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