Líderes mundiales se reúnen en Londres para evaluar la situación de Somalia

Líderes mundiales y representantes de la ONU y otras organizaciones asisten hoy en Londres a una conferencia internacional sobre Somalia, donde evaluarán los progresos efectuados en asuntos como la seguridad y acordarán medidas con las que respaldar al país.

Se prevé que en esta reunión, copresidida por la primera ministra británica, Theresa May, y a la que asistirán unos 40 mandatarios, se establecerán pautas destinadas a que Somalia mejore sus niveles de paz y prosperidad antes de 2020.

Según han desvelado fuentes del Ejecutivo del Reino Unido, los líderes valorarán los avances conseguidos desde que se celebró la primera cumbre sobre el país africano hace cinco años.

En este sentido, durante la cita, que tendrá lugar en el céntrico palacete de Lancaster House, se buscará acometer mejoras en una serie de sectores cruciales de ese país, como son la seguridad, la economía, la política y en materia humanitaria.

Los representantes de los distintos gobiernos estudiarán qué medidas han de adoptarse para contraatacar la amenaza terrorista de grupos como el islamista Al Shabaab al tiempo que se protegen los derechos humanos.

Uno de los objetivos será incrementar el compromiso de la comunidad internacional sobre las reformas políticas en ese país, a fin de ayudar a construir un estado más democrático, estableciendo pautas para las elecciones de 2020.

Según el programa, se escucharán propuestas de los líderes regionales y federales somalís sobre qué reformas constitucionales son necesarias para poder trabajar de manera más efectiva.

La conferencia instará también a la comunidad internacional a respaldar la recuperación económica del país africano, al considerar que una economía más fuerte que ofrezca empleos y genere ingresos locales es esencial para lograr un desarrollo y estabilidad sostenibles en Somalia.

Se espera también que de la reunión de hoy surja un nuevo acuerdo entre la comunidad internacional y Somalia que contemplará asuntos como las elecciones y los compromisos necesarios para erradicar la corrupción.

En 2011 Somalia estaba sumida en una situación política inestable, con grandes partes del país controladas por el grupo islamista Al Shabaab, y afectada de una hambruna que se cobró la vida de 250.000 personas.

En respuesta a la crisis, el Reino Unido convocó a la comunidad internacional a la primera conferencia sobre Somalia, celebrada en la capital británica en 2012, tras la cual la situación del país comenzó a mejorar.