Grandes proyectos financiados por los juegos de azar
A lo largo de la historia, los juegos de azar han evolucionado manteniendo siempre una alta popularidad. Las loterías son un ejemplo de ello, dado que millones de personas han depositado sus ilusiones en ellas desde que existen. Por otro lado, juegos como el póker o la ruleta se han convertido en una de las aficiones más conocidas de los últimos siglos. Asimismo, los beneficios que los casinos y las distintas casas de apuestas han recaudado, han servido para construir todo tipo de infraestructuras y para ayudar en proyectos públicos.
Hoy en día, todavía existen proyectos financiados por casinos, pero si queremos conocer el origen de esta tradición, debemos trasladarnos a China, concretamente a la época de la Dinastía Han (206 a.C – 220 d.C). En ella encontraremos el primer monumento histórico financiado por loterías: la Gran Muralla China. La idea se le ocurrió a un grupo de consejeros del emperador, que después de un ataque enemigo, no tenía fondos suficientes para reparar los restos de la muralla. La lotería que se creó llevó por nombre “keno”, sustantivo que todavía puede escucharse en algunos casinos americanos.
Las carreteras de Roma también tuvieron un destino similar. Poco después del suceso anterior, la capital de la ahora Italia sufrió un ataque que destrozó gran parte de sus infraestructuras. El emperador Octavio Augusto decidió entonces pagar estos daños a través de la lotería pública. Se dice que en las fiestas de Saturnalia (festividades similares a la navidad) los asistentes podían comprar billetes para ganar diferentes tipos de premios, como un cuadro reconocido, una bolsa con monedas de oro o algún objeto más simple.
La Ivy League, también conocida como Liga de la Hiedra en español, también acudió al mismo recurso para financiarse en el siglo XVIII. Esta unión de universidades estadounidenses de elite, entre las que se encuentran Harvard o Columbia, no siempre dispuso de recursos económicos como ahora, por lo que tuvieron que vender lotería para financiar la construcción de dormitorios o edificios complementarios.
Finalmente, comentaremos el caso de la ciudad de Washington D.C,, que en 1823 fue ampliada y restaurada. Para pagar dichas mejoras, el congreso aprobó que 100.000 dólares de premios de la lotería nacional (Grand National Lottery), fuesen destinados a ello. De este modo, la capital de Estados Unidos pudo volver a brillar gracias a la medida aprobada.
En definitiva, los juegos de azar han estado con nosotros durante muchos años y lo seguirán estando. A pesar del desconocimiento de muchos, lo casinos no solo cumplen una función de entretenimiento, sino que parte de sus beneficios están destinados a obras de gran interés. Por ello, tienes una razón más para visitar alguno.