Ada Colau se declara bisexual: "Tuve una novia italiana durante dos años"
La alcaldesa de Barcelona desvela su vida íntima y afirma haber tenido relaciones tanto con hombres como con mujeres.
Entrevista a calzón quitado de Jorge Javier Javier Vázquez a Ada Colau, que ha revelado en "Sábado de Luxe" detalles de su vida íntima, entre ellos, sus relaciones con algunas mujeres y un noviazgo con una joven italiana durante dos años que la marcó durante algún tiempo. Fue una relación forjada durante la beca Erasmus de Colau en Milán que después continuó a distancia, dos años que dejaron en la actual alcaldesa de Barcelona una cierta impronta.
Relató Colau que "tuve primero un novio y después una novia italiana. El se llamaba Paolo, ella Elena y fue la primera vez que me enamoraba de una mujer". Tras la ruptura hubo alguna otra relación lésbica, pero no llegó a cuajar". Preguntada por Jorge Javier sobre la reacción de su familia, Colau explicó que sus padres tenían amigos gays y que en casa se aceptó la relación con naturalidad y Elena llegó a ser presentada en la familia. "Era una más cuando venía a casa", dijo.
"Viva el amor"
La alcaldesa aseguró que la singular confesión no tenía que afectar a su vida política, que no es una casa que vaya contando por ahí, "pero tampoco tengo que esconderlo". "Viva el amor y que cada quiera a quien quiera", zanjó al respecto.
En el espacio, la exactivista antidesahucios insistió en los intentos de violación que había sufrido durante su adolescencia y concluyó que el hecho de que una vez un policía le reprochara que caminara sola a altas horas de la noche y "vestida de aquella manera" significa que hay un sesgo "machista" en la sociedad.
Porros, no
Colau desmintió que su nombre sea Inmaculada y confesó además que durante su adolescencia se emborrachó "porque era lo que tocaba". No obstante, dijo que en el Ayuntamiento están muy concienciados con el problema del alcohol y las drogas en los adolescentes. Preguntada por si había fumado porros, aseguró que sólo en un par de ocasiones y que le había sentado tan mal que no había repetido.