La medicina natural, en auge

Cada vez son más las personas que quieren cuidar de su salud sin tener que estar tomando todo tipo de fármacos. Por ello, hoy acudimos a un gran aumento en el uso de técnicas y productos naturales, con los que se pueden aliviar ciertas dolencias sin necesidad de ir a la farmacia. Una solución que es bastante interesante, siempre que seamos realistas y reconozcamos que no es una fórmula milagrosa para todo.

Algunas ventajas de la medicina natural

 A diferencia de los fármacos, los productos naturales carecen de efectos secundarios. También nos ayudan a mejorar la alimentación, ya que sobre todo se trata de escoger con cuidado los productos que consumimos con el fin de prevenir males futuros. En www.paraquesirven.es se pueden ver los usos que tienen algunos de estos productos, así como las propiedades que tienen de cara a mejorar la salud.

Por otro lado, los tratamientos naturales suelen ser más económicos que los medicamentos. En parte porque muchos de estos los tenemos en casa o en nuestro mercado habitual, en lugar de en una farmacia.

Más que tomar algún producto

 Al igual que con la medicina convencional, cuando hablamos de tratamientos naturales no nos referimos solo a tomar un determinado alimento para aliviar un síntoma o prevenir una enfermedad. También tiene mucho que ver nuestro modo de vida y seguir algunas pautas como hacer ejercicio. Algunas veces se trata de ejercitarnos de forma general, mientras que otras puede que nos hagan falta ejercicios específicos para mejorar nuestro organismo, como eliminar la papada y tener un aspecto más saludable.

La acupuntura, un método milenario

 Un ejemplo de cómo la medicina natural no es solo cuestión de comer algo o tomar algún compuesto es la acupuntura. Esta técnica oriental se basa en el conocimiento del cuerpo, y cómo este está conectados desde el exterior hacia los diferentes órganos internos. Es muy útil para tratar dolores, adicciones e incluso la infertilidad, entre otras cosas.

Los tratamientos de fertilidad natural se están mostrando bastante eficaces. A menudo basta un test fertilidad femenina para determinar si es posible aumentar las probabilidades de éxito para quienes buscan tener un hijo. En ocasiones puede ser una cuestión de estrés o ciertos problemas emocionales, que afectan directamente a los órganos encargados de la reproducción.

La acupuntura es mucho más que colocar agujas en el cuerpo y esperar a que tengan un efecto casi milagroso. Se trata de una serie de técnicas que se han perfeccionado durante siglos, y que devuelven al cuerpo el equilibrio perdido, como la falta de descanso o los desajustes en el ciclo menstrual. Gracias a la acupuntura fertilidad mejora porque lo hace todo el organismo en general, después de que el ritmo de vida y las situaciones a las que nos vemos sometidos nos hayan desviado en mayor o menor medida de lo que es un cuerpo sano y funcional.

¿Son incompatibles la medicina natural y los fármacos?

 No solo no son incompatibles, sino que es fundamental tener en cuenta cuándo se necesita cada uno de los tipos. La medicina natural es clave para la prevención de las enfermedades, así como para tratar determinados síntomas de estas. Sin embargo, a veces también es necesario que tomemos algún medicamento, sobre todo cuando padecemos una enfermedad de cierta gravedad. Puede que al principio se necesite un fármaco y posteriormente podamos hacer un mantenimiento con productos naturales.

En todo caso, lo mejor es consultar con el médico qué remedios son los que nos hacen falta para mejorar. Y no renunciar nunca a uno u otro cuando nos lo recomiende.