Cerca de 2.000 nuevos árboles cobran vida en Santa Brígida gracias al programa del Fondo Verde Forestal

Cerca de dos mil nuevos árboles, entre almendreros, higueras, acebuches, sabinas y fayas, crecen ya en los barrancos de Santa Brígida tras el trabajo coordinado del Cabildo de Gran Canaria con el Ayuntamiento satauteño, integrado en el programa municipal del Fondo Verde Forestal, que ha permitido también realizar actuaciones de prevención de incendios y lucha contra la erosión del suelo. 

Las plantaciones, realizadas entre los meses de noviembre de 2018 y enero de 2019 buscan un uso sostenible del medio con un equilibrio “entre el punto de vista ambiental y el del bienestar”, indicó el consejero de Medio Ambiente, Miguel Ángel Rodríguez, quien destacó que con estos trabajos “no solo aumenta el valor medioambiental del entorno y disminuyen las condiciones para los incendios forestales”, sino que además suponen “una mejora para la calidad de vida de la ciudadanía” que dispone a partir de ahora de “nuevos rincones de naturaleza para disfrutar”.   

Las plantaciones tuvieron lugar en tres localizaciones del municipio, el barranco de Santa Brígida, la finca de El Bermejal y la finca de El Gamonal, que suman en total 6 hectáreas de terreno en los que se retiró abundante material en forma de cañaverales, matorral, zarzas y helechos que ocupaban toda la superficie disponible e impedían que se desarrollasen los árboles. 

En el barranco de Santa Brígida, primero se realizó un primer desbroce de matorrales a finales de otoño, así como otros dos desbroces de mantenimiento, uno en diciembre y otro en enero. Seguidamente se plantaron 150 acebuches, que recibieron con agradecimiento las lluvias de noviembre y soportaron perfectamente la sequía del pasado mes de diciembre. Estas plantas serán regadas antes del verano, ya que está contemplado el riego posterior como parte fundamental del proyecto de reforestación. 
 
En El Bermejal, lo más destacado ha sido la introducción de especies del monteverde en sustitución del zarzal desbrozado, al estilo de las medianías del norte de Gran Canaria, pero escogiendo siempre la zona de más umbría del barranco. Esta zona cuenta a partir de ahora con 28 ejemplares nuevos de barbusano, 28 de madroño y 12 de palo blanco, además de faya, que hacen un total de 150 árboles.

Debido a la abundancia de unidades de fayas en vivero, se plantaron además 390 unidades, plantadas en la vaguada del zarzal y la ladera derecha. El resto de las especies plantadas son, como corresponde a la zona, especies de termófilo. Se trata de 346 acebuches, 168 guaydiles y 28 sabinas, repartidas por toda el área de repoblación. A principios de enero, la plantación se completó con 56 nuevos dragos.

En la zona del Gamonal se plantaron 400 almendros y 350 higueras, a lo que se le suma un ejemplar de algarrobo de un vecino que lo trajo de su casa y lo ofreció amablemente para que fuera plantado, por lo que entró a formar parte del nuevo bosque del municipio.