CINE
Filmoteca proyecta la película de Tarkovski sobre el famoso pintor ruso Andrei Rublev
Este minucioso retrato de la vida social, política y artística en la Rusia del siglo XV se podrá ver mañana, martes, en Gran Canaria, y el jueves en Tenerife
Filmoteca Canaria continúa esta semana con el ciclo dedicado al célebre cineasta ruso Andréi Tarkovski. En esta ocasión proyectará la película que dedicó al pintor Andrei Rublev, que constituye un minucioso retrato de la vida social, política y artística en la Rusia del siglo XV. 'Andrei Rublev' se podrá ver mañana, martes 19, en el Teatro Guiniguada (Gran Canaria) y el jueves 21, en Multicines Tenerife, en versión original con subtítulos. La sesión comienza a las 19.00 horas, y se prolongará durante más de tres horas.
Distinguida con el Premio de Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica (FIPRESCI) en el Festival de Cannes de 1969, la película de este importante e influyente autor del cine soviético sitúa la historia a principios del siglo XV, cuando Rublev acude junto con sus compañeros a Moscú para pintar los frescos de la Catedral de la Asunción del Kremlin. Fuera del aislamiento de su celda, pronto empezará a percatarse de las torturas, crímenes y matanzas que tienen atemorizado al pueblo ruso.
La crítica internacional se ha referido a esta nueva entrega de Tarkovski como "la mejor película de autor de todos los tiempos", "poderosa y majestuosa película, un bálsamo para nuestras almas heridas", "una hermosa reconstrucción onírica de la vida del pintor ruso de la época medieval" o impacta con sus inesperadas explosiones poéticas".
Este nuevo ciclo de Filmoteca, titulado "Andréi Tarkovski. A través del espejo" incluye cuatro de sus películas más emblemáticas. La semana pasada con su ópera prima, 'La Infancia de Iván' y continuará las siguientes con 'El espejo' (1975), que ocupa un lugar central en su filmografía, y 'Nostalgia' (1983). Las entradas se pueden adquirir al precio de 2 € (1€ mayores de 65 años y desempleados).
Lo más sorprendente de su obra, ligada a la tradición poética, es la capacidad de Tarkovski para sacar fuerza de las evidentes limitaciones técnicas, pues como señaló Eugenio Trías, en De cine: Aventuras y extravíos, el cine de Tarkovski "no tiene su forja creativa en la sala de montaje, [...] la creación se realiza en la toma, y tiene en el plano su unidad mínima y material. [...] Lo que implica repetir las tomas todas las veces que sea necesario, si es preciso ad infinitum, de manera que la imagen deje brotar la forma que le conviene, la que descubre su verdad".