El PP culpa a Morales de las plagas de moscas en Gran Canaria por incumplir su compromiso de resolver el problema del tratamiento de los residuos animales

El Grupo Popular en el Cabildo de Gran Canaria ha culpado hoy al presidente Antonio Morales de las continuas plagas de moscas aparecidas en las últimas semanas en diferentes núcleos de población de la Isla por incumplir su compromiso ante los ganaderos de buscar una solución en el plazo de cuatro meses para la correcta gestión y tratamiento de los residuos de origen animal que se generan en Gran Canaria.

 Según el PP, los incumplimientos de Morales y la inacción del gobierno insular ante este grave problema de salud pública es lo que está provocando la aparición constante de focos en distintos puntos de la Isla, lo que está generando las quejas de muchos vecinos cansados de soportar en sus viviendas la invasión de estos insectos.

 El PP asegura que la raíz del problema radica en la falta de plantas especializadas para depositar y tratar correctamente los excrementos de animales que se producen en las explotaciones ganaderas de la Isla, en especial las granjas avícolas, tras el cierre hace unos meses del centro gestor de residuos orgánicos radicado en el Polígono de Arinaga, en el municipio de Agüimes.

 “Morales se comprometió a resolver esta situación ante la imposibilidad de poder utilizar los complejos medioambientales de la Isla para la gestión de estos residuos orgánicos, pero el presidente del Cabildo ha mirado para otro lado una vez más y ha abandonado a su suerte a los ganaderos, que ahora no disponen de ningún lugar para poder trasladar estos residuos”, explica el portavoz popular, Marco Aurelio Pérez.

 Esta circunstancia hace que el estiércol y la gallinaza de las granjas avícolas no puedan ser tratados adecuadamente para convertirlo en compost, con el consiguiente daño medioambiental para la atmósfera, el suelo y el agua, además del perjuicio para las personas que viven en las proximidades por la proliferación de insectos y malos olores.

 En los últimos meses, los vecinos de Gran Canaria han denunciado la aparición de plagas de moscas en distintas zonas de la Isla como Maspalomas, sobre todo en El Tablero y San Fernando; el entorno de la playa de Melenara, en Telde; y distintos núcleos de la capital como San Lorenzo o Tamaraceite, sin que el Cabildo haya hecho nada para poner fin a esta problemática.