Ordenadores y tablets, los nuevos reyes del material escolar
El curso escolar 2020/2021 se presenta con un panorama de lo más extraño e incierto. Las clases están pendiendo de un hilo ante los posibles brotes de coronavirus, y eso ya ha llevado a los padres e incluso a los propios estudiantes a asegurarse cambiando de material escolar.
Un cambio que se está centrando todavía en la tecnología. La segunda mitad del curso escolar anterior quedó totalmente herida por el confinamiento y por unas clases virtuales que no se desarrollaron como debían. Y es que, aunque la gran mayoría de hogares de España tiene conexión a internet, ni se contaba con el equipo, ni con las conexiones adecuadas.
Ahora las clases han vuelto a su cauce tradicional, aun con padres e incluso docentes en contra de ello. Las aulas se han abierto para seguir avanzando en los temarios durante el nuevo curso, aunque guardando las pertinentes medidas de seguridad e higiene para evitar que los contagios de disparen.
A pesar de ello, las familias se han prevenido y han tomado nota de los problemas habidos en el transcurso del curso pasado. Por esa razón, entre las listas de material escolar, más allá de lápices, de gomas, de libretas y de libros, lo que han imperado han sido los dispositivos inteligentes.
Las tablets, los ordenadores, todo aquello que permita estudiar a distancia de forma segura y sin problemas. Eso es lo que ha reinado en las ventas. De hecho, hasta se ha visto un cambio en las contrataciones de tarifas de internet y teléfono en los hogares. Esta vez los padres no quieren que a sus hijos les pille el toro si hay que renunciar a las clases presenciales y volver a las clases virtuales.
¿Por qué tablets y ordenadores portátiles?
A efectos técnicos y económicos, más rentable que estas inversiones es la compra de un ordenador de sobremesa. Los equipos de escritorio suelen ofrecer una mayor eficiencia a cambio de un coste menor, principalmente porque no están sujetos a las restricciones del factor de forma de los portátiles y dispositivos de menor tamaño.
Eso había llevado a muchas marcas a pensar en un posible auge para este tipo de equipos de cara al nuevo curso. Sin embargo, han sido los formatos móviles los que han llevado la voz cantante. Porque sí, las ventas de ordenadores de sobremesa pueden haber crecido, pero los reyes han sido los portátiles y las tablets.
Desde los ordenadores modestos para estudiantes de Primaria hasta los mejores portátiles para universitarios, pensados para trabajar tanto con ofimática como con cualquier software especializado. Y es que no hay que olvidar que, en las etapas superiores de la enseñanza, los alumnos empiezan a trabajar con herramientas presentes en el día a día dentro del ámbito profesional.
El motivo principal tras el auge en ventas de estos dispositivos, además de poder garantizar un transcurso de clases online totalmente fluidas, no es más que facilitar la movilidad. Aunque las restricciones en este sentido se han endurecido en las últimas semanas, para un estudiante, contar con estos aparatos es algo que suma libertad.
Pueden estudiar en su habitación o en el salón, en compañía de sus padres. Y por supuesto, si miramos al ámbito universitario, todos esos alumnos que deben trasladarse lejos de casa para acudir a clase, en muchas ocasiones otras ciudades o incluso provincias, no pueden llevarse un equipo de sobremesa.
Precisamente por eso es por lo que los ordenadores portátiles han ganado más peso, además, porque también son capaces de ofrecer muy buenas prestaciones de cara al ámbito educativo. Junto a ellos, las tablets para estudiantes se han posicionado como las otras grandes favoritas a la hora de comprar el material para la escuela, para el instituto o para la universidad.
Que estas estén acercándose o incluso superando a las ventas de ordenadores portátiles es un fenómeno que responde a dos factores enormes: los precios más bajos y las prestaciones más altas. Aunque sean dispositivos ligeramente distintos, sus posibilidades son prácticamente las mismas que las que ofrecen los portátiles.
De hecho, algunos modelos incluso van más lejos. Al contar con integración y compatibilidad con tarjetas SIM, también permiten realizar llamadas desde cualquier parte como si fueran smartphones. Es más, prácticamente se podría afirmar que son versiones más grandes y potentes de los teléfonos móviles que vemos a día de hoy.
Así, dadas las prestaciones y el abaratamiento de los precios, además del contexto que se está viviendo en todo el país, es como estos dispositivos poco a poco han ido ganando terreno en el sector de la enseñanza y los estudios. Para muchos son ya una herramienta indiscutible en su día a día como estudiantes, y probablemente vuelvan a ser el medio principal a través del que acudir a las clases.
