Expansión publica la nueva iniciativa del mago de Arguineguín: David Silva, del balón a los viñedos canarios en San Bartolomé de Tirajana
Según publica Expansión: "Cuando el pasado 3 de abril la Real Sociedad ganaba la final aplazada de la Copa del Rey 2019-2020, David Silva conquistaba el decimonoveno título de su carrera ¿Repetirá tantos éxitos como bodeguero? En junio el futbolista debuta con seis referencias de Tamerán, su bodega en Gran Canaria: cinco blancos monovarietales y un clarete.
Han pasado unos tres años. David Silva (Arguineguín, Gran Canaria, 8 de enero de 1986) jugaba entonces en el Manchester City. Aficionado al vino tiempo atrás, el capitán de los citizens se surtía en vinotecas inglesas, pero también hacía pedidos online a una tienda madrileña. Sabedores de su predisposición absoluta a probar referencias nuevas y también de su potencial interés en vinos de sus islas de origen, le mandaron algunos, entre ellos una botella de Ciruelo 2016, elaborado por la bodega Suertes del Marqués en el Valle de la Orotava, en Tenerife.
Le sorprendió. No era para menos. Hablamos de un tinto (listán negro) con 95 puntos Parker, 96,5 para la añada de 2018. Conoció a Jonatan García, el bodeguero que estaba detrás. Se convenció de que se podía hacer buen vino en su tierra. Y se lanzó a ello. En unas semanas embotella las que serán las seis primeras referencias de Tamerán, el vino que ha empezado a producir en el municipio grancanario de San Bartolomé de Tirajana, en el centro de la isla.
Con variedades de uva locales, sobre todo blancas, como malvasía volcánica, baboso blanco o vijariego, debutará con unas 13.000 botellas de cinco blancos más un clarete con precios en el entorno de entre 20 y 30 euros. "Son vinos, sobre todo, que te van a decir de dónde son, vas a saber que son canarios", afirma el hoy jugador de la Real Sociedad. "Limpios, elegantes..., creo que van a ser muy buenos". Algo parecido de lo que se podría decir de su juego.
Incursión en Gredos
No son, sin embargo, su primera incursión enológica. "Descubrí este mundo hace ya unos años de la manera habitual: empiezas a ir con compañeros algo mayores, lo pruebas, te gusta, te vas aficionando, vas conociendo...", describe. "Pero no fue hasta hace unos cinco años cuando me metí más profundamente".
Fue con Sisi, un viejo amigo, Sisinio González, también del 86, y con quien jugó en las categorías inferiores del Valencia C.F. y de la Selección Española. También Sisi llegó a Primera División, jugó en equipos como Osasuna, el Hércules o el Valladolid, y también en Japón y Corea. "Somos muy amigos, queríamos hacer algo juntos y me comentó que él tenía un amigo que estaba muy metido en el vino".
Entraron como inversores entonces en Soto Manrique, una bodega en Gredos donde elaboran varios vinos con garnacha. Pero ahora, en esta aventura en su propia tierra, la implicación del campeón del mundo en Sudáfrica, dos veces campeón de Europa y cuatro de la liga inglesa es mucho mayor. Con ayuda de García se propuso elaborar su propio vino en Gran Canaria y comenzó por buscar terreno.
Lo encontró por Internet a finales de 2019, una finca en la vertiente sur de San Bartolomé de Tirajana, con una extensión de unas 100 hectáreas en la que entonces había unas seis de viñedos, a unos 700 metros de altitud sobre el nivel del mar. No se elaboraba vino; la uva que producían se vendía a una bodega de la D.O. Gran Canaria. Hoy son ya alrededor de ocho las hectáreas plantadas y aunque la primera añada, de 2020, que Tamerán se dispone a comercializar en junio, se ha elaborado en la bodega de un amigo, ya están construyendo la suya propia. "Esperamos que esté terminada en junio y que la añada de 2021 la podamos hacer aquí", confirma el futbolista. Con la bodega a pleno rendimiento creen que podrán elaborar entre 30.000 y 50.000 botellas, no descartan comprar uva a otros viticultores.
Mineralidad, frescura y acidez
Tras la vendimia, realizada entre julio y agosto del año pasado, la vinificación se ha llevado a cabo en fudres de roble de 2.500 litros. Todos los procesos han seguido los principios de la elaboración ecológica, un credo al que García también se adhiere en la vecina Tenerife, en Suertes del Marqués. "Se trata de vinos, por sus características, con un marcado perfil aromático", revela el enólogo, algo mayor que Silva (está a punto de cumplir 43 años) y que lleva elaborando vino en Canarias desde 2006. "Las variedades, el clima, con bastante oscilación térmica y en una zona de Gran Canaria sometida a mayor estrés hídrico que otras de la isla donde también se hace vino, y el suelo volcánico aportan mucha mineralidad, mucha frescura y mucha acidez en boca".
Esa personalidad, esa tipicidad marcada, es a lo que aspira David Silva. Lo que más le gusta de un vino, afirma, es que revele su procedencia, ya sea Galicia, Rioja, Francia o el Piamonte, por citar cuatro de las regiones que señala entre las que más interesantes le han resultado, particularmente la primera, si bien asegura que ante todo le gusta probar y descubrir cosas nuevas.
Salvo Vidueño, el nombre que le han dado al clarete y del que producirán apenas 300 botellas, el resto de los vinos de esta primera añada de Tamerán son monovarietales. Cada uno lleva el nombre de la uva con que están elaborados: Malvasía volcánica, Marmajuelo, Verdello, Verijadiego Blanco y Baboso Blanco, el más alto de gama, con un precio de 30 euros y del que saldrán unas 650 botellas.
En el empeño de subrayar el vínculo con la isla de la que procede, optaron por el nombre de Tamerán, supuesto topónimo de la isla de Gran Canaria antes de la conquista que durante años se aceptó como tal, y que aunque hoy se asume que fue una invención de siglo XIX, sigue remitiendo a ese imaginario. La bodega se acoge a la Denominación de Origen Gran Canaria, una D.O. pequeña que agrupa a unas 40 bodegas. Su producción es baja en relación con la de islas como Lanzarote o la propia Tenerife, que engloba en su territorio hasta cinco denominaciones de origen distintas. También en La Palma, La Gomera y El Hierro se elaboran vinos. Exceptuando una existencia casi testimonial de viñedos en Cabo Verde, las islas Canarias son el punto más meridional del Hemisferio Norte donde se produce vino.
De Canarias al mundo
Aunque las 13.000 botellas no son una producción excesiva, los vinos de Tamerán nacen con vocación de salir de la isla. No solo hacia territorio peninsular. Esta primera añada se distribuirá, además de en España, en Inglaterra, en EEUU, en Alemania y en Suecia. "Yo quiero que este vino sea una referencia en las islas y en el mundo entero", enfatiza Silva. "Quiero hacer las cosas bien y que cuando alguien en cualquier lugar del mundo vea o pruebe este vino diga: 'Pues mira, me gustaría visitar esa zona, probar sus otros vinos, ir a catarlos, visitar sus bodegas', y ya de paso que conozcan la isla y a su gente".
A sus 35 años aún le queda uno más de contrato con la Real Sociedad, pero en el futuro se ve de vuelta en Arguineguín. "Han sido muchos años fuera...", apunta aquel a quien por su habilidad en el manejo del balón y su capacidad para dar el pase decisivo apodaron "el Mago". A unos 45 minutos de la bodega, se imagina pasando mucho tiempo entre los viñedos aprendiendo con García los secretos del vino. Algo le ha enseñado el fútbol. "En el fondo, y aunque son mundos muy distintos, hay cosas en común. En el fútbol, come en esto del vino, hay muchos jugadores, pero cada uno tiene su estilo. Eso es parecido en los dos mundos. En ambos hay mucho trabajo detrás, mucho más del que se ve. Y en los dos uno busca que se identifique y que se aprecie de dónde viene, sentir orgullo de tus raíces y hacer que los demás lo sientan. Al final lo que yo quiero es hacer un vino que se identifique de dónde viene".