LA LAGUNA
FEPECO aprecia la valentía de Luis Yeray Gutiérrez por la defensa de la variante de La Laguna
FEPECO, valora la gallardía de Luis Yeray Gutiérrez, alcalde de La Laguna, al apoyar incondicionalmente, el nuevo trazado de la variante de la autopista TF-5, a su paso por la Ciudad de los Adelantados. Su postura se valoriza, porque pone la política como servicio público, anteponiendo los intereses generales de la Ciudad y de Tenerife, a los particularismos egocéntricos. Es una solución para desahogar la autopista del Norte y a la vez unificar, de una vez por todas, el municipio territorialmente, que actualmente está dividido por la red viaria existente. No se entiende que una Cuidad Patrimonio de la Humanidad esté atravesada por una autopista cogestionada en todo momento. La afectación sobre el territorio va a ser mínima, porque la mayoría del trazado va a ser en túnel, respetando el suelo agrario y los núcleos de población que se encuentran en la zona, además los beneficios que generará superan cualquier comparación, porque posibilitará una movilidad eficiente, rápida, segura y fuera del núcleo poblacional. Servirá para hacer efectivo el desvío del tráfico de la autopista del Norte a su paso por Guamasa y hasta la Vía de Ronda, posibilitando una Rambla entre la Rotonda del Padre Anchieta y el Aeropuerto de Los Rodeos.
La Circunvalación a La Laguna, no afecta sólo al municipio, sino que es de vital importancia para la vertebración territorial de la isla de Tenerife y sobre todo, para finalizar el tan ansiado Anillo Insular, que no sólo hay que cerrarlo por el Norte y Sur, sino también en la zona Metropolitana.
Oscar Izquierdo enfatiza que las voces críticas a este proyecto vienen más de intereses partidistas e ideológicos que, por cuestiones técnicas, medioambientales o de oportunidad. Cuando el representante de Podemos en el Ayuntamiento, declara que «nuestra posición es la misma de siempre. La mejor vía es la que no se hace y la apuesta debe ser por el transporte público colectivo», se contradice con las acciones de su propio partido en cuanto a la movilidad en Tenerife, que rechaza el Tranvía hasta el Aeropuerto de Los Rodeos o el tren del Sur. Con la boca grande defienden el transporte público guiado y después cuando hay que ponerlo en marcha, ejecutando las obras oportunas para su disfrute, lo rechazan, en una permanente y demagógica contradicción. Todo lo contrario, a sus compañeros en Gran Canaria, que lideran y apuestan la construcción del tren en dicha isla.