El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria adjudica el suministro de 3.000 sensores para concluir el proyecto de sensorización de las plazas de zona azul y verde

La Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través de la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Sagulpa), ha adjudicado a la empresa Vodafone España S.A.U. el suministro de 3.000 sensores que servirán para culminar con el proyecto de sensorización de la zona azul y su ampliación a la zona verde en la capital, en el marco de la Estrategia LPGC Mueve.

 La actuación cuenta con las ayudas de los fondos de la Unión Europea Next Generation, en concreto, con una partida subvencionada de 810.000 euros que cubrirán la casi totalidad del precio total, estimado en 900.000 euros.

 El proyecto fue presentado a las ayudas a municipios para la implantación de zonas de bajas emisiones y la transformación digital y sostenible del transporte urbano, en el marco del “Plan de choque de movilidad sostenible, segura y conectada en entornos urbanos y metropolitanos”, siendo uno de los beneficiarios de los fondos europeos.

 Tal y como afirma el concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, “la adquisición e instalación de los nuevos sensores permitirán concluir con los trabajos que ya se están haciendo en la zona azul, y ampliar a la zona verde, contribuyendo así a la búsqueda de aparcamiento y ofreciendo al conductor información en tiempo real del nivel de ocupación en su área de interés”.

 El objetivo de la sensorización es facilitar la rotación al mismo tiempo que se evita la congestión del tráfico, todo ello en aras de la sostenibilidad y el medio ambiente. José Eduardo Ramírez señaló que “el proyecto convierte a la capital en puntera a nivel internacional en la aplicación de esta solución de aparcamientos inteligentes”. Es más, “los 3.000 sensores que se instalarán ahora se suman a los ya implementados con la iniciativa Inteligencia Azul, siendo un total de 6.500, lo que nos pone al nivel de grandes ciudades como San Francisco o Los Ángeles, y de hecho nos coloca en el top 5 de proyectos implementados en el ámbito mundial”.

 El contrato ha sido adjudicado por un precio de 732.254 euros (sin IGIC), con un plazo de garantía de los sensores de 60 meses, mientras que deberán estar entregados, instalados y puestos en funcionamiento en los siguientes 9 meses a contar desde la firma del mismo.

 Los criterios que se han aplicado para dicha adjudicación tienen que ver con la correspondencia entre la memoria técnica y la muestra presentada, la integración al sistema actual de sensores ya instalados, así como la integración con los sistemas externos. También ha sido positivamente valorada la baja económica respecto al precio de la licitación.

 En este sentido, las condiciones técnicas exigen que los sensores dispongan de transmisión de datos de tecnología NB-IoT o LTE-M o similar, proporcionada por operadores de redes móviles; la capacidad de incorporarse a la plataforma de Inteligencia Azul que permita la gestión de los dispositivos y el análisis de los datos por tipo de plaza, con módulos especiales para el control de las plazas de PMR, de carga y descarga; la integración con la aplicación LPAPARK tanto para los transportistas, con información de la disponibilidad de plazas de carga y descarga, como para usuarios de PMR y por supuesto, al resto de ciudadanos sobre las plazas libres u ocupadas en tiempo real.

 Por otro lado, los 3.000 sensores tendrán un proceso de calibración automático fiable sin necesidad de intervención humana, deberán ser insensibles a los cambios meteorológicos como sombra, sol, caída de hojas…, presentan un mínimo del 97% de precisión en la detección de la ocupación de las plazas y las rotaciones, y deberán actualizar datos en la plataforma en menos de 30 segundos con la información exacta desde que un coche entra o sale de la plaza de aparcamiento, entre otras características técnicas.

 Con esta licitación son ya varios los proyectos que han conseguido financiación de los fondos Next Generation, donde se cuentan además de la sensorización, también los parquímetros inteligentes y la redacción del proyecto y ejecución del aparcamiento intermodal del centro, en el área de Vegueta.