La experiencia de recorrer Lanzarote en patinete
Conocer Lanzarote, la isla de Lanzarote, es siempre una experiencia extraordinaria e inolvidable.
La isla de Lanzarote tiene alrededor de 850 kilómetros cuadrados de lava y ensueño formada a golpe de erupciones. Este territorio insular de nombre artúrico resulta, como el concepto matemático, una suma de elementos infinitos. Nunca se acaba.
Viajar por Lanzarote produce una sensación extraña y apasionante, que a veces sugieren calma y otras veces, inquietud.
Extraña como sus entrañas, atravesada de negros y ocres, teñida a veces de verdes, y siempre con la lava y el cielo azul como exponentes mágicos de su entorno.
Tan honda es la atracción que los viajeros vuelven constantemente, buscando siempre las respuestas al misterio que supone su naturaleza salvaje y volcánica.
Recorrer Lanzarote en patinete
Pero si ya de por sí, recorrer la isla es toda una experiencia, hacerlo utilizando una nueva forma de desplazamiento recién llegada, y para quedarse, lo es aún más.
Recorrer la isla de Lanzarote sobre un patinete eléctrico es toda una experiencia que el viajero debe intentar poder llevar a cabo.
Todos conocemos ya lo que supone viajar en patinete eléctrico y la libertad de poder disfrutar de un medio de transporte alternativo, limpio y económico. Sin embargo, esta nueva forma de viajar requiere acercarse a los expertos, como https://elpatinete.net/, para poder conocer, porque hay una amplísima gama de patinetes, cuál de ellos se adapta mejor a nuestras condiciones particulares.
Y es necesario acercarse a consultar a los expertos porque no todo son ventajas. También hay inconvenientes. Y el principal inconveniente que se puede encontrar quién decida viajar en grandes distancias lo encontrará en la recarga para su patinete eléctrico, inconveniente que deberá tener previsto para evitar los problemas inherentes a ello.
Qué ver en Lanzarote
Una vez elegido aquel que se ajusta a las exigencias de lo que requerimos, recorrer la isla puede ser un placer hasta ahora no conocido.
Nos dará el viento en la cara mientras recorremos las buenas vías de Lanzarote que nos acercarán a Los Jameos del Agua, y de allí, a la Cueva de Los Verdes.
Podremos recorrer las misteriosas carreteras que te introducen en un paisaje extraño, casi lunar, que van serpenteando entre volcanes y que nos llevarán directamente a la Montaña del Fuego y, desde allí, acercarnos a Los Hervideros para poder contemplar la fuerza increíble del mar a chocar contra la lava como preámbulo de lo que, poco después, nos dejará sin habla al contemplar las aguas verdes de El Golfo.
Con el patinete eléctrico, esta nueva forma de viajar, podrás llegar, incluso, hasta la misma orilla de las playas de arena dorada de Playa Blanca, Famara, o Papagayo.
Un viaje así resultará inolvidable e inigualable utilizando, además, un vehículo eléctrico, no contaminante, que se corresponde, justamente, con una isla que siempre gozó de la fama de salvaguardar el paisaje desde que el artista, César Manrique, consiguió concienciar a todo un pueblo, y a sus instituciones, de que el principal patrimonio que tenía la isla de los volcanes era ése, precisamente ése, su riqueza paisajística, única en el mundo, y que la ha hecho referente planetario de conservación ambiental.
