La Policía Local de Telde colabora con Tráfico en una campaña de vigilancia y control de furgonetas

La Policía Local de Telde ha colaborado con la Dirección General de Tráfico en una campaña especial de vigilancia y control de furgonetas, que tuvo lugar entre el 21 al 27 de noviembre.

Durante esta iniciativa, enmarcada en la programación de las Campañas y Operaciones de Vigilancia y Control del año 2022, los agentes realizaron inspecciones sobre los vehículos, como autorizaciones y documentos, condiciones técnicas y elementos de seguridad, además de sobre los conductores, tanto en el permiso de conducción como pruebas de alcoholemia.

Esta campaña hizo hincapié en que la conducción de una furgoneta no es igual que la de un turismo, sobre todo si va cargada, por lo que la sujeción de la carga es vital, ya que cualquier desplazamiento incide sobre la estabilidad del vehículo por desplazamiento del centro de gravedad. Por eso motivo, es más alta la incidencia de salidas de la vía y vuelcos que puede explicarse por la excesiva o mala colocación de la carga.

Las furgonetas representan el 7% del parque nacional, con más de dos millones y medio de vehículos de un total de más de treinta y cinco millones, y estuvieron involucradas en el 9% de los siniestros de tráfico del país durante el año 2021, y relacionadas con el 11% de las personas fallecidas en siniestros de tráfico durante ese mismo año.

Cabe destacar que las furgonetas son un tipo de vehículo que se conduce con el mismo permiso que un turismo, pero tiene características diferentes. Su siniestralidad es objeto de preocupación debido a múltiples factores, entre ellos el cambio cultural que asemeja la furgoneta a un turismo familiar y su uso como herramienta de trabajo.

Asimismo, el aumento del comercio electrónico, cuyo transporte de mercancías se suele realizar en este tipo de vehículos, incrementa su presencia en las vías, principalmente de carácter urbano.

Por todos estos motivos, la campaña estuvo centrada en estos vehículos, prestando especial atención a las condiciones técnicas y su carga, pero también a las causas concurrentes más habituales de la siniestralidad en las vías de circulación españolas, en particular, el exceso de velocidad y el consumo de alcohol y drogas.