Impulso a la construcción industrializada en Canarias gracias a BIM
La construcción industrializada busca hacerse un hueco en las islas Canarias con el objetivo de solventar la emergencia habitacional que padece el archipiélago. Todo un reto para el que cuenta con la inestimable ayuda de la tecnología BIM.
El Gobierno canario quiere promover la construcción industrializada en las islas para agilizar y acelerar la construcción de viviendas en un contexto de emergencia habitacional. La Dirección General de Industria ha publicado una convocatoria de ayudas para impulsar este sistema de edificación en el que la mayor parte de la obra se realiza en una fábrica y después se transportan al lugar de construcción para su ensamblaje final. Un modelo constructivo que encaja a la perfección con la metodología BIM (Building Information Modeling) y su apuesta por la digitalización y la sostenibilidad.
Este plan de construcción industrializada tiene por objetivo reforzar el sector y promover nuevas fórmulas de edificación de viviendas más eficientes, sostenibles, limpias y ágiles. Se trata de un sistema alternativo a la construcción tradicional que cada vez tiene más presencia en diversos países europeos y americanos y con el que se pretende dar respuesta “a un problema social importante como es la falta de vivienda”, tal y como reconoció Manuel Domínguez, consejero de Economía, Industria, Comercio y Autónomos del Gobierno canario. Estos incentivos son una de las soluciones al problema habitacional ya que las casas modulares son más eficientes y tienen plazos reducidos de ejecución, precios más bajos y precisan de menores trámites administrativos.
El programa incluye dos líneas de ayudas. Por un lado, a la producción industrial y al estudio y desarrollo de capacidades de producción, y, por otro, establece una línea en paralelo de visualización del producto final. Ambas se incluyen dentro de la línea de modernización y diversificación del sector industrial y cuenta con una dotación presupuestaria de 12 millones de euros. Además, los incentivos tienen varias vertientes. Se impulsará tanto a las empresas que se dediquen a construir secciones prefabricadas (que sirvan como paredes, techos o sistemas aislantes), como a las entidades que estudien cómo hacer que esta industria crezca y sea rentable en las Islas. También se apoyará a las empresas que hagan planos que permitan vislumbrar cómo quedarían estas viviendas una vez fabricadas.
Con este plan, el Gobierno canario no sólo busca tener nuevas zonas residenciales construidas en un corto periodo de tiempo sino hacer que la industria isleña crezca y se especialice en el nicho de las viviendas modulares. Ahora bien, para que el programa sea un éxito, es necesaria la implicación del sector. “Podremos resolver los problemas de vivienda en el archipiélago, impulsando factores como la sostenibilidad y la innovación y dando, a la vez, una oportunidad a sectores tradicionales vinculados a la construcción”; señaló Domínguez.
Digitalización y BIM
En esta industrialización de la construcción, la metodología BIM juega un papel fundamental. Se trata de un modelo de trabajo colaborativo que facilita la comunicación entre los distintos profesionales del proyecto. “BIM permite centralizar toda la información de un proyecto (geométrica, documental, etcétera) en un modelo digital desarrollado por todos los agentes que intervienen”, explica Borja Sánchez Ortega, Director de Proyectos y Director del Máster BIM Manager Internacional (+VR) de la consultora especializada Espacio BIM (www. espaciobim .com). Y la mejor manera de sacar el máximo partido a esta tecnología es a través de open BIM, es decir, a través de estándares abiertos e internacionales que favorecen la interoperabilidad entre agentes, procesos y herramientas. Uno de ellos es IFC, formato que utilizan en Dasein Ingenieros, tal y como explica Íñigo Salazar, Director Técnico de dicha empresa especializada en Ingeniería de estructuras, en la entrevista publicada en la sección AbiertoXObras de la mencionada consultora. “La información a los fabricantes la enviamos en formato IFC, PDF y DWG. A partir de estos datos, en función de sus medios productivos y el tipo de elemento que van a fabricar, generan sus propias planillas y modelos de control numérico que emplean para producir los elementos”, afirma.
