Agua para La Palma alerta de un “desastre económico y ecológico” con el acuífero del Valle de Aridane por las futuras desaladoras
La asociación denuncia los perjuicios de sobreexplotar aún más los pozos a costa de mezclar su agua con la desalada del mar por las plantas que proyectan CanoPalma y el Cabildo, y propone como alternativa extraer más agua del Túnel de Trasvase para darla a los dueños de pozos a cambio de reducir las extracciones para evitar la intrusión marina en el acuífero
La Asociación Agua para La Palma denuncia que los proyectos para instalar desaladoras promovidos por CanoPalma y el Cabildo palmero causarán la "pérdida total", por salinización, del acuífero del Valle de Aridane, así como del patrimonio de los propietarios de acciones de los pozos en esta comarca-
Considera la asociación que, “además de producir agua que seguirá siendo cara, se embarcarán en una deuda a largo plazo que puede ser una amenaza para dicha inversión a medida que también en el corto plazo la naturaleza haga su trabajo y el efecto de la intrusión marina empeore la calidad del agua que de forma engañosa quieren lograr”.
Este colectivo ciudadano reacciona así a los intentos, por parte del Cabildo, de justificar la implantación de caras plantas de desalación de agua marina, con el argumento de que la altísima conductividad de los pozos se debe a los gases volcánicos relacionados con la erupción de 2021, y que podrán seguir explotándose mezclando su agua con la desalada del mar.
Una justificación que la asociación tacha de "falsedad", pues un estudio del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) ya demostró en 2022 que la calidad del agua extraída del acuífero no se había visto afectada por este fenómeno volcánico.
Frente a la pretensión del Cabildo de continuar con la sobreexplotación de los pozos y corregir los aumentos de conductividad de su agua con la proveniente de las proyectadas desaladoras, la asociación plantea como alternativa perforar el Túnel de Trasvase (en un “incomprensible estado de abandono” por el Cabildo desde hace años), para obtener más agua pública de calidad, entregando a los propietarios de los pozos los caudales que dejen de elevar con el fin de que disminuyan el volumen de bombeo en el acuífero costero del Valle y además se comprometan a mantener la red de distribución.
De ese modo, destaca la asociación, "ganaríamos todos, porque se mantendría el caudal de agua, se mejoraría su calidad y las acciones de las comunidades de propietarios no perderían su valor".
En cambio, “la solución alentada por el Cabildo y el lobby del agua acarreará en muy poco tiempo la total e irreversible inutilización de los pozos por intrusión de agua marina en todo el acuífero costero, proceder del todo punto técnicamente irracional".
MALA GESTIÓN, NO CAMBIO CLIMÁTICO
Por tanto, si no se da marcha atrás a estas decisiones, para este colectivo palmero “estaríamos ante una nueva muestra de la nefasta gestión política del agua en La Palma, que es la verdadera causa, y no el cambio climático, de que se haya tensionado el suministro de este bien básico y que sea cada vez más caro y de peor calidad”.
La asociación enfatiza que esto ocurre precisamente en la isla canaria con más recursos hídricos por su posición geográfica, su estructura geológica y su tradicional forma de captarla del acuífero subterráneo mediante galerías. Y de ahí que prevenga a la población palmera de que “el Cabildo y el lobby del agua nos quieren llevar a un desastre económico y ecológico”.
Por todo lo expuesto, este colectivo de ciudadanos sigue en su labor de denuncia pública y, en aquello de lo que tenga indicios de ilegalidad, también en los tribunales, donde la Justicia les ha dado la razón.
Ante los perjuicios que prevé para los pozos del Valle de Aridane, la asociación anima a que, llegado el momento, se reclamen responsabilidades en los tribunales de Justicia por esa futura pérdida patrimonial.
En cualquier caso, advierte que, con este aviso, ya pide “a todos posicionarse de forma reflexiva y responsable en la toma de decisiones, tanto por la parte pública como por la privada”. “Al final", previene la asociación, "no será porque no les avisemos de lo que va a ocurrir, con lo que unos y otros serían igualmente corresponsables, tal como ya está sucediendo, por ejemplo, con malas decisiones tomadas con respecto a la tasa de transporte del agua, que se denunció en los tribunales ,y de cuyo perjuicio van a tener que responder quienes la apoyaron”.
OFRECIMIENTO PARA MEDIR LA CALIDAD DEL AGUA
Además, en su intento de contribuir a un mejor conocimiento popular sobre el estado real de la calidad del agua, la asociación pone a disposición de cualquier interesado la posibilidad de realizar mediciones de los parámetros del agua de que dispongan, tanto de abasto como de riego.
Para ello, Agua para La Palma ha adquirido un conductivímetro multiparamétrico que ha sido tarado por el laboratorio agrobiológico del Cabildo de La Palma. De este modo, la asociación espera elaborar una radiografía propia sobre la calidad del agua en la isla, como alternativa a los datos oficiales.
Para solicitar la realización de las mediciones la asociación ofrece los teléfonos 669 383 951, 609 245 277 y 609 911 051, a cambio de un donativo simbólico de 10€ para poder amortizar la inversión de esta herramienta que está disponible para toda la población.
LAS MEDIDAS QUE PROPONE LA ASOCIACIÓN
Una vez más, Agua para La Palma reivindica un mejor aprovechamiento del mayor acuífero de Canarias, dando prioridad a la reperforación del Túnel de Trasvase; la recuperación de grandes depósitos privados que han quedado abandonados y que acumulaban agua de aumentos de la Caldera de Taburiente; la ejecución de cierres hidráulicos en todas las galerías de la isla para sacar el agua a demanda y la reposición de las redes de distribución, sobre todo públicas (que pierden como mínimo el 50% del agua que transportan).
A la falta de respuesta oficial a las anteriores peticiones se suma la mala gestión pública de caras inversiones públicas como La Laguna de Barlovento, cuya rotura durante años se mantuvo oculta y supuso la pérdida de la mayor capacidad de embalse de agua en la isla.
Hay que recordar que el 95% del agua en La Palma es de origen subterráneo, explotado mediante galerías cuya gestión no se controla adecuadamente por el Consejo Insular de Aguas. El 5% restante es, por tanto, almacenamiento de escorrentías.
La asociación incide además en que el Consejo Insular de Aguas (CIALP) "sigue tergiversando datos utilizándolos de forma engañosa, dado que bajan la media de almacenamiento de todas las balsas a nivel insular al incluir el porcentaje de un embalse vacío que hace que se baje la media total".
Es lo que, según la asociación, han hecho el CIALP en su última publicación sobre el del estado de almacenamiento de las balsas s mismas a fecha 7/11/24, rebajando una media que para estas fechas sería normal aún con la sequía producida hace escasos años, recordando que la dinámica ha cambiado y ya no se puede seguir hablando de sequía y negando que llueve.
Un dato que rebate el propio gerente del Consejo Insular, Javier Peña, en declaraciones a la TV Canaria ( (1) Video | Facebook ) en las que reconoce que la Balsa de Bediesta, tras las lluvias acumuladas desde octubre, ha pasado del 47% al 75% en capacidad de llenado, todo con agua subterránea, al tiempo que ha ratificado que La Laguna de Barlovento no se llena con agua de escorrentía, motivo por el que se construyó en su día, sino con agua de galerías y nacientes, “con lo que, sin quererlo, da la razón a todo cuanto ha defendido siempre el ingeniero Carlos Soler, asesor técnico de la asociación”.
Por otro lado, la asociación invita a la población a fijarse en que la gráfica publicada por el Cabildo de La Palma en cuanto al aumento y la disminución de los caudales durante el año no señala más que su comportamiento normal en presencia o ausencia de lluvias, reduciéndose en meses secos y recuperándose en meses húmedos, argumento que ha explicado también de forma reiterada este colectivo ciudadano.
La asociación subraya que “aún estamos a tiempo de exigir que la cordura empiece a reinar en la toma de decisiones con un recurso crucial para nuestra economía, tanto para el sector primario, motor económico de la isla, como para el resto de sectores y su futuro desarrollo”, y que con las medidas que propone la asociación se podría disponer de agua más barata y de mayor calidad, siempre sujeta a que de ella se haga una gestión verdaderamente eficaz en todas sus formas de explotación.