La decadencia del tipo variable en las hipotecas… ¿o no?
Los que tienen hipoteca a tipo variable saben lo que es estar en una montaña rusa, aunque nunca hayan ido al parque de atracciones.
La hipoteca a tipo variable, históricamente predominante en España, ha experimentado una notable disminución en su popularidad en los últimos años. Diversos factores económicos y tendencias del mercado han influido en este cambio de preferencia entre los consumidores españoles, y hay razones para ello sin duda.
Uno de los principales factores que ha contribuido a esta transformación es la volatilidad del euríbor, índice al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas variables en España. Aunque el euríbor cerró noviembre de 2024 en el 2,5%, su nivel más bajo en los últimos 25 meses, las fluctuaciones previas generaron incertidumbre entre los prestatarios, llevando a muchos a optar por hipotecas a tipo fijo que ofrecen cuotas constantes y mayor previsibilidad en los pagos mensuales.
Además, las entidades financieras han adaptado su oferta a esta nueva demanda. Bancos como Evo Banco o Santander ofrecen hipotecas a tipo fijo con TAE alrededor del 3% a plazos de 25 años, haciendo más atractivas estas opciones para los clientes que buscan estabilidad en sus pagos.
La evolución de los tipos de interés también ha influido en esta tendencia. El Banco Central Europeo ha realizado ajustes en los tipos de interés, afectando directamente al euríbor y, por ende, a las hipotecas variables. Aunque recientemente se han observado reducciones en los tipos, la preferencia por hipotecas a tipo fijo se ha mantenido. ¡Como se dice, mejor pájaro en mano que ciento volando!
De todas formas, las variables aún presentan ventajas para ciertos perfiles de clientes, según indican reputados consultores expertos en hipotecas. Por ejemplo, aquellos con capacidad para asumir posibles incrementos en las cuotas podrían beneficiarse de las actuales ofertas competitivas en hipotecas variables, con diferenciales atractivos sobre el euríbor, y más teniendo en cuenta la tendencia a la baja de los tipos de interés en general.
Con esto de las tendencias y las previsiones siempre hay que ser cautos, puesto que cualquier evento no espero puede alterar dichas tendencias. Lo hemos visto con el Covid-19, y la invasión de Ucrania, y puede ocurrir con otros eventos no esperados.
Como indican en la consultoría hipotecaria Aim Inver Financial Advisors, es esencial que cada cliente evalúe su situación financiera y perfil de riesgo antes de decidir el tipo de hipoteca que mejor se adapta a sus necesidades.