La tecnología, con la que se conoce el estado de los depósitos en tiempo real, permite que el proceso de vaciado sea más eficiente, reduciendo la contaminación y el gasto en transporte
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través del Servicio Municipal de Limpieza y el área de Innovación Tecnológica de la Concejalía de Presidencia, Hacienda, Modernización y Recursos Humanos, ha finalizado la instalación de sensores de llenado en 600 contenedores de vidrio en 64 barrios de la ciudad, que permiten conocer en tiempo real el estado de cada uno de ellos para proceder a su vaciado de manera más eficiente.
El concejal de Limpieza, Héctor Alemán, ha resaltado que “con esta tecnología damos un paso importante para mejorar la eficiencia del Servicio de Limpieza, reduciendo de forma considerable los costes del servicio, porque nos permite reducir los gastos derivados del transporte y, con ello, contribuir a la sostenibilidad de nuestro planeta mediante la economía circular”.
El edil ha apuntado: “Seguimos mejorando la higiene urbana de nuestra ciudad a través tanto de los dispositivos especiales que estamos desarrollando como de las actuaciones conjuntas con Parques y Jardines, nuevos servicios como los puntos de acopio transitorio, y la instalación de estos sensores”.
Y ha añadido: “Vamos a continuar con este proceso de modernización a través de los nuevos contratos, que nos van a permitir instalar contenedores inteligentes para agilizar la recogida de los residuos, además de impulsar el reciclaje entre la ciudadanía”.
Esta actuación, que cuenta con una inversión de 106.623,36 euros, ha permitido la instalación de los sensores en los barrios de Almatriche Alto, Almatriche Bajo, Cañada Honda, Casa Ayala, Casablanca I, Casablanca III, Ciudad del Campo, Costa Ayala, Cuesta Ramón, Dragonal Alto, Dragonal Bajo, El Batán, El Fondillo, El Lasso, El Román, El Secadero, El Zardo, Hoya Andrea, Hoya de la Plata, Hoya del Parrado, Isla Perdida, Jinámar, La Calzada, La Galera, La Matula, La Montañeta, La Paterna, La Suerte, Ladera Alta, Las Majadillas, Las Mesas, Lomo Apolinario, Lomo Blanco, Lomo Los Frailes, Lomo Verdejo, Los Giles, Los Hoyos, Los Tarahales, Marzagán, Miller Bajo, Llano de las Nieves, Monte Quemado, Pedro Hidalgo, Pico Viento, Piletas, Salto del Negro, San Cristóbal, San Francisco de Paula, San José, San Juan, San Lorenzo, San Nicolás, San Roque, Santa Margarita, Siete Puertas, Tafira Alta, Tafira Baja, Tamaraceite, Tenoya, Tres Palmas, Vega de San José, Vegueta, Zárate y Zurbarán.
Con el objetivo de seguir mejorando la eficiencia en la recogida de la fracción vidrio, se han instalado dispositivos IoT (Internet de las Cosas) en los contenedores, que están diseñados para la monitorización continua del nivel de llenado.
En este sentido, el concejal de Presidencia, Hacienda, Modernización y Recursos Humanos, Francisco Hernández Spínola, ha indicado que “esta actuación representa un claro ejemplo de cómo la tecnología puede contribuir a mejorar la calidad de vida en nuestra ciudad. La instalación de sensores inteligentes en los contenedores nos permite tomar decisiones basadas en datos en tiempo real, lo que se traduce en una gestión más eficiente, sostenible y económica del servicio de recogida de residuos”.
Esto genera, además, una reducción en el gasto en transporte y en las emisiones de gases de efecto invernadero, tan perjudiciales para el medioambiente, mediante la optimización de las rutas de los vehículos recolectores.
Los nuevos dispositivos, que se integran en la plataforma Gestión Inteligente de Residuos (iniciativa LPA Inteligencia Azul), son de última generación. En su elección ha primado la interoperabilidad y la reducción del mantenimiento mediante la utilización de protocolos estándar y abiertos, la optimización de su consumo energético, la resistencia a impactos y su capacidad para soportar condiciones ambientales adversas.
Además de medir el nivel de llenado, los dispositivos IoT también cuentan con sensores de temperatura y posición GPS, proporcionando una solución integral para la gestión de residuos.
En este proyecto se ha utilizado la conectividad NB-IoT, que reduce considerablemente los precios de servicios de comunicación, además de proporcionar una alta eficiencia energética que garantiza una larga vida a las baterías instaladas.
Uno de los aspectos clave de la implantación de esta tecnología es que, a mayor cantidad de residuos de vidrio recogidos, la tasa que el Ayuntamiento debe abonar al Ecoparque por su tratamiento se reduce. Esto repercutirá de forma directa en la tasa de basuras que se implantará en 2026, siguiendo así con el trabajo de reducir esta cuantía.
6.050 toneladas de vidrio
La fracción selectiva es la que más peso aporta a la cantidad de residuos recogida selectivamente. En 2023 se recogieron en Las Palmas de Gran Canaria 6.050,34 toneladas de vidrio mediante los 1.378 contenedores que actualmente están instalados, siendo la aportación por vecino de 16,01 kilogramos al año. El Servicio Municipal de Limpieza espera que, con estos nuevos dispositivos, mejore el servicio y se siga incrementando la cantidad de vidrio que se recicla en la ciudad.