Cuando se trata de comprar un motor de segunda mano, uno de los aspectos que más preocupa a los potenciales compradores es la durabilidad de este. Después de todo, el motor es el corazón del vehículo, y su buen estado puede marcar un antes y un después entre una compra inteligente y una inversión que puede salir cara a largo plazo. Pero ¿qué hay de ciertos mitos que circulan sobre los motores usados? ¿En qué podemos confiar? 

A continuación, desglosamos para ti los principales mitos y verdades sobre la durabilidad de motores usados, con ejemplos específicos, para que puedas tomar la decisión más adecuada y segura.

Mito 1: Los motores usados siempre están en malas condiciones

Verdad: No todos los motores de segunda mano están desgastados o en mal estado. La condición de un motor usado depende en gran medida de su mantenimiento previo, del kilometraje, del uso que se le haya dado y de cómo se haya cuidado el vehículo. Por lo que, un motor bien mantenido puede durar muchos años más, incluso si ya tiene algunos kilómetros en su haber.

Por ejemplo, los motores Volkswagen Caddy de segunda mano que han recibido cambios de aceite regulares y revisiones periódicas pueden ofrecer un rendimiento excelente y una buena durabilidad. Lo importante es siempre revisar el historial de mantenimiento y realizar una inspección previa a la compra, preferiblemente por un mecánico de confianza.

Mito 2: Los motores de segunda mano tienen menos vida útil que uno nuevo

Verdad: Aunque en general un motor nuevo puede tener una vida útil más larga, un motor usado en buen estado puede igualar o incluso superar el rendimiento de uno nuevo si se ha cuidado correctamente. La clave está en la revisión previa, en detectar posibles problemas y en realizar los mantenimientos necesarios.

En el caso de los motores Porsche de segunda mano, por ejemplo, suelen ser conocidos por su ingeniería de alta calidad y durabilidad. Si se adquieren con un historial de mantenimiento completo y se realiza una revisión exhaustiva, pueden ofrecer una durabilidad comparable a la de un motor nuevo, con la ventaja de un menor coste de adquisición.

Mito 3: Los motores usados siempre tienen problemas ocultos

Verdad: No necesariamente. Es cierto que algunos motores pueden tener problemas ocultos, pero esto no es una regla. La mejor manera para evitar estos problemas es realizando una inspección previa y adquiriendo el motor de segunda mano en lugares confiables, como los desguaces certificados, concesionarios especializados o plataformas digitales con buena reputación como ventademotores.es y motorsegundamano.net. 

De igual forma, para evitar sorpresas, lo más recomendable es realizar una prueba de compresión, revisar el historial de mantenimiento y, si es posible, realizar un análisis de aceite para detectar posibles anomalías. Por lo general, en los motores de segunda mano, una revisión exhaustiva puede revelar si ha sido sometido a reparaciones mayores o si presenta signos de desgaste excesivo.

Mito 4: Los motores diésel usados son menos duraderos que los de gasolina

Verdad: La durabilidad de un motor depende en gran medida de su uso y mantenimiento, no del tipo de combustible. Ambos tipos de motores, diésel y gasolina pueden ofrecer una excelente durabilidad si se cuidan adecuadamente.

Sin embargo, los motores diésel suelen ser más robustos y con una vida útil mayor en muchos casos, especialmente si se usan en condiciones de carga frecuente, como en vehículos comerciales o de trabajo. Además, los que se usan en transporte ligero, suelen tener una buena reputación por su resistencia y durabilidad.

Mito 5: La marca del motor determina automáticamente su durabilidad

Verdad: Aunque algunas marcas son reconocidas por su calidad y durabilidad, ninguna marca garantiza una vida indefinida. La durabilidad de un motor depende en gran medida del cuidado y del mantenimiento que reciba, más que de la marca en sí.

Como ya dijimos, los motores Porsche de segunda mano son famosos por su ingeniería de precisión y resistencia. Sin embargo, incluso estos motores pueden presentar problemas si no se les da el mantenimiento adecuado. 

Consejos para comprar motores usados con buena durabilidad

Para evitar errores y asegurarte de adquirir un motor usado que te dé confianza, aquí tienes unos consejos fundamentales:

• Revisa el historial de mantenimiento: solicita todos los registros de revisiones y reparaciones. Un motor bien cuidado generalmente tiene un historial completo y transparente.

• Inspección mecánica profesional: antes de cerrar la compra, pídele a tu mecánico de confianza que haga una revisión exhaustiva del motor. Esto puede detectar problemas ocultos y prevenir sorpresas futuras.

• Prueba de uso: si es posible, realiza una prueba de conducción para comprobar el rendimiento del motor, la respuesta del acelerador y el funcionamiento general.

• Verifica el kilometraje: un motor con un kilometraje moderado y un mantenimiento regular puede ofrecer más garantías de durabilidad que uno con muchos kilómetros y poca historia de mantenimiento.

• Considera la marca y el modelo: algunas marcas tienen una reputación de durabilidad y resistencia, pero esto no excluye la necesidad de una revisión cuidadosa.

• Compra en lugares confiables: los desguaces y plataformas digitales especializadas y los vendedores con buena reputación suelen ofrecer motores de segunda mano revisados y garantizados.

¿Merece la pena comprar un motor usado?

La respuesta es un rotundo sí, siempre y cuando se realice de forma responsable. Los mitos sobre la poca durabilidad de los motores usados no son una regla, sino una percepción que puede evitarse con las precauciones adecuadas. 

Recuerda que un motor usado, si ha sido cuidado y mantenido adecuadamente, puede ofrecer una durabilidad de entre 150.000 y 300.000 kilómetros o incluso más. No nos cansaremos de repetir que la clave está en el mantenimiento preventivo, en la calidad del uso y en la revisión antes de la compra.

Así que, si estás pensando en adquirir un motor de segunda mano, sigue los consejos que te hemos dado y asegúrate de conseguir un motor que te ofrezca un buen rendimiento. ¡No dejes que los mitos te impidan hacer una buena inversión en tu vehículo! 

Con información, paciencia y una buena inspección, puedes obtener un motor usado que te acompañe en muchas aventuras más.