FEPECO pide al Gobierno de Canarias y al Cabildo acelerar la licitación de las obras de carreteras y la construcción de viviendas en Tenerife

El sector de la construcción tiene la solución, porque es sólido y con fuerte potencial, para acometer todas las obras que la Administración Pública canaria sea capaz, en su ineficacia enfermiza, sacar a licitación

 Oscar Izquierdo, presidente de FEPECO, insiste en la urgente necesidad de emprender cuanto antes, con urgencia, la licitación de las obras públicas de carreteras en nuestra isla, tanto las de interés regional como insular, ya que hay que pasar de las palabras a los hechos concretos. Realidades tangibles es lo que demandamos. El tiempo apremia, la ciudadanía lo exige y el sistema productivo lo necesita. Desatascar los inconvenientes que existan en los proyectos que están sobre la mesa, debe ser la tarea primordial, tanto de los políticos responsables de la gobernanza, como también de los empleados públicos y técnicos asignados a estos menesteres. Le pedimos que no insistan en buscar problemas, ni escudarse en herencias recibidas, sino en encontrar respuestas adecuadas, buscando soluciones posibles, que haga factible una simbiosis construcción-territorio sustentable, que permita empezar a licitar, adjudicar, ejecutar y terminar las obras de carretas, que sigue siendo el sueño insular. La pesadilla de las colas, atascos y colapsos viarios tiene que pasar a ser historia.

 Igualmente hay que emprender políticas operativas, con la imprescindible cooperación cierta del Gobierno de Canarias, Cabildo y Ayuntamientos, que hagan posible el comienzo rápido de la construcción de vivienda, tanto pública como privada, debido a la emergencia habitacional que padecemos, junto a la demanda angustiosa que existe, por parte de miles de ciudadanos y cientos de familias. La colaboración público-privada tiene que pasar de ser una frase demagógica, nunca cumplida en Canarias, para convertirse en una práctica habitual, porque es la única forma de acometer diligente la construcción de viviendas, en sus distintas categorías y clasificaciones, porque todas son necesarias para las distintas solicitudes existentes. 

 Estas dos carencias, carreteras y viviendas, está lastrando el liderazgo regional de Tenerife, frenando su crecimiento económico y por supuesto, impidiendo un desarrollo social armónico y de acuerdo con las exigencias de los vecinos y residentes en la isla.