Mal comienza este 2023. Aún no ha terminado de arrancar el año y ya cuatro mujeres han sido asesinadas por la violencia machista que algunos niegan. Una violencia sin sentido basada en un falso sentimiento de "superioridad" hacia las víctimas (generalmente mujeres) y el intento de anularlas como personas...
Pero mal vamos si nos limitamos a contabilizar el número de mujeres asesinadas y no nos centramos en buscar la forma de erradicar estos comportamientos anómalos, propios de mentes enfermas, de personas que desprecian a otras en base a su género, perjudicando su identidad física, psicológica y social...
La violencia física es la más visible, pero no es la única: está también la violencia psicológica, la que busca humillar y atar a la víctima. La que más aumenta ese sentimiento de "superioridad" del agresor y busca la dependencia de la víctima hacia su maltratador. Es la que se lleva a cabo mediante insultos, descalificaciones, humillaciones, que puede llevar aparejada la violencia social, controlando las amistades de la mujer, o el contacto con sus seres queridos. Así como la violencia económica, impidiendo el acceso y control de la víctima hacia su dinero...
Por no hablar de la violencia sexual, esa que se basa en el sentimiento de "propiedad" del indivíduo mal nacido hacia su pareja y que "no entiende" el Derecho a decir NO de ella, lo que acaba resultando en relaciones sexuales no deseadas mediante coacción, amenaza o indefensión...
El problema, como casi siempre, viene dado por una Educación pésima, basada en los "valores tradicionales" que una parte de la población sigue defendiendo, "olvidando" por el camino que esos mal llamados "valores tradicionales" se corresponden con épocas pasadas y que ya debieran estar superadas. Ya no estamos en aquellos tiempos de la mujer en casa, con la pata quebrada, y el hombre en la calle presumiendo de "hombría". Lejos quedan aquellos tiempos en que la mujer ni siquiera podía tener una cuenta corriente en el banco sin permiso de su marido...
Pero muchos de esos "gallitos" sin educación, sentimientos ni cerebro están envalentonados: el resurgimiento del fascismo (aunque ahora intenten no usar el nombre) por todo el mundo, incluido el Estado español, les hace sentirse apoyados. El negacionismo de la ultraderecha fascista española y el hecho de sentirse "representados" en el Congreso de los Diputados les da alas...
Triste y penoso es que cada vez que ocurre una tragedia como la de estos días, con mujeres asesinadas a manos de sus parejas, la insensible, inhumana y descerebrada ultraderecha española (así como buena parte de su marca original, el partido heredero del franquismo que intenta disimularlo) no solo no condenen estos viles asesinatos, sino que se empeñan en negar lo evidente y prefieren usar el término "violencia doméstica". Así como no respetar ni siquiera un triste minuto de silencio por las víctimas de asesinos despiadados carentes de todo rasgo de humanidad...
De hecho, muchos de estos machistas sin cerebro, así como la prensa afín y blanqueadora del fascismo usan estos asesinatos como "prueba" de lo que consideran "fracaso" del Ministerio de Igualdad, obviando que si algo está fracasando es la Sociedad en su conjunto al "normalizar" estos comportamientos y no centrarnos TODOS en avanzar como Sociedad avanzada, respetuosa e igualitaria. Nuestra Humanidad merece algo mejor...
