José Fco. Fernández Belda
Viviendo en San Borondón
Este libro, “Mi historia”, recoge las memorias del actual emir de Dubai, el jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum. Está escrito en el año 2019, en primera persona y es un texto de lectura muy interesante para todas aquellas las personas que quieran conocer cómo y porqué se logró llevar a cabo el meteórico ascenso hacia el liderazgo de la modernidad y el desarrollo social, económico y financiero de un trozo de desierto bendecido por la existencia de petróleo.
Rashid Al Maktoum es el actual emir de Dubai, así como el vicepresidente y primer ministro de los Emiratos Árabes Unidos (EAU). Desde la muerte de su hermano en 2006, ha ocupado estos cargos y ha supervisado sin descanso el desarrollo del emirato y de Dubai como una ciudad y una referencia internacional, impulsando proyectos icónicos como las conocidas palmeras o el Burj Khalifa, el rascacielos más alto del mundo, con 828 metros de altura. Sobre la historia de Abu Dabi, capital del emirato, hay otro libro titulado “De los harapos a la opulencia. Una historia de Abu Dabi” escrito por Mohammed A.J. Al Fahim en el que también se le reconoce al jeque su incansable esfuerzo.
A modo de dedicatoria, el emir escribe en su libro: “Los emiratíes pueden encontrar en este documento un testimonio sobre quiénes éramos y cómo conformamos uno de los países más dinámicos y prósperos de la Tierra”. Él es consciente del éxito que ha conseguido por la innovadora, disruptiva y eficaz gestión del interés común para favorecer a su pueblo, más que a su persona y familia. En una entrevista, creo recordar que concedida a la BBC, decía que los árabes de los EAU y de Qatar habían vivido desde siempre pobres como nómadas en el desierto, pero que habiendo sido bendecidos con el oro negro, era necesario ser conscientes de que el negocio del petróleo, no el agotamiento del mismo, se acabaría algún día y si no estaban preparados para ello, habiendo diversificado las fuentes de riqueza, volverían a vivir en el desierto como sus ancestros.
En el capítulo final del libro, el jeque Rashid Al Maktoum hace una reflexión sobre la crisis que por el año 2019 estaba atravesando el mundo árabe. En su opinión el problema real es administrativo y no político. Por ese motivo necesitábamos administradores que fueran capaces de reducir las diferencias en el desarrollo de nuestra región antes que políticos. Esta sensata idea, que comparto totalmente, creo que debiera ser muy tenida en cuenta en Europa para superar con éxito los tiempos de crisis profunda de valores y metas que estamos viviendo y padeciendo, centrándonos más en la administración eficaz de los recursos públicos que en luchas ideológicas y sectarias. En suma, sumar esfuerzos útiles y no fomentar parálisis y desencuentros por razones políticas a corto plazo.
Es en este mismo sentido que el libro se remata con un decálogo de reglas prácticas que el autor cree necesarias para una buena administración pública. Siguiendo el esquema propuesto por los Diez Mandamientos, estas reglas se pueden sintetizar en las dos primeras: Una: servir a las personas, no a los sistemas establecidos. Y la segunda: no veneres tu posición pues los trabajos, puestos y responsabilidades son temporales.
Dicho con esta claridad por el que ha demostrado con su vida, su dedicación y sus resultados el éxito de estas reglas, sólo me cabe decir: Amén, que los políticos que soportamos sigan su consejo.
