Nuevamente en el Informe de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales nuestra Comunidad Autónoma es la peor calificada del resto del Estado español, 10 informes y en todos ellos, Canarias es la Comunidad que peor ha desarrollado la Ley de la Dependencia.
El Gobierno de CC por décima vez consecutiva, se excusa en que sus datos no reflejan lo mismo. Increíblemente los datos y lo vivido por miles de personas es dramático y avalan por completo el informe, el ejecutivo debiera escuchar a la ciudanía de vez en cuando.
Canarias tiene un grave problema, y lo peor es que no está dispuesta, ni quiere cambiar el modelo socio-sanitario, de ahí las dificultades para ponernos a la altura de otras comunidades autónomas. Es necesario la inversión, pública y privada, necesitamos contar con las empresas del sector socio-sanitario y de la construcción y diseñar un modelo que compense las inversiones y la garantía de ejecución, debemos creernos los retornos de La Ley de Dependencia y la generación de puestos de trabajo estables. Un plan de infraestructuras que busque una verdadera financiación con compromisos duraderos, garantizando la financiación de las plazas en el justo valor.
La solución que Clavijo propone ahora, es un servicio de urgencias Geriátrico en los Hospitales, pero si ya el 80% de los pacientes son mayores y con patologías múltiples, ¿que se pretende entonces, atender lo antes posible a los mayores, hacerles las pruebas diagnósticas de manera rápida y mandarles para sus casas? . Claro, esto choca de lleno con la cronicidad de los grandes dependientes o dependientes severos, personas mayores que necesitan una atención continua y especializada que debiera ser desde el ámbito socio-sanitario y claro este hecho no está cubierto ni por asomo. Ese es el Gran Problema.
Canarias incluso en su II plan de Infraestructuras después de más de 15 años del primer plan y de los pobres resultados, no se marca una verdadera hoja de ruta en la consolidación de un nuevo modelo multiservicios, que dé cobertura a la gran demanda del presente y del futuro. Medidas como la concertación con toda la oferta de plazas de las empresas privadas, en tanto en cuanto, no existan los servicios y las infraestructuras públicas que den respuesta a los más de 12.000 personas que están sin los servicios para personas dependientes.
La pregunta es, ¿porque no se hace o lo que se hace es insignificante?, en lugar de eso, tenemos más de 3000 grandes dependientes sin tratar y muchas de las veces forman parte del colapso que se vive en urgencias, 120 mayores dependientes han vivido en los pasillos de urgencias de los hospitales en los últimos tiempos y en algunos casos han tenido que ser los propios jueces los que dicten una residencia para los mismos.
En Canarias, las personas con más necesidades de atención son los que menos han visto reducir su lista de espera. El informe es claro, políticas de “low cost”, nos hemos dedicado a dar servicios a los bajos dependientes y medios para cubrir el expediente y está bien, pero nos hemos olvidado a sabiendas de las personas grandes dependientes porque conllevan mayor inversión. En el II Plan nuevamente las plazas son las menos para los grandes dependientes, nuevamente se deja a las familias para que asistan en condiciones penosas, ayudas a domicilio insuficientes, sin respiros, e incluso sin los medios necesarios (material, compresas, pañales, camas ortopédicas, bañeras, elevadores, adaptación del entorno accesible, etc…) .
El gasto público en euros por población potencialmente dependiente en el 2017 en Canarias supuso 336, 08 mientras en el País Vasco es de 970 euros, y la media para el estado español es
de 591,24euros. Claro con tamaña diferencia, poco se hace con parches de última hora en un II plan de infraestructuras que no va a cambiar nada en absoluto, porque las previsiones por la misma Consejería de Bienestar Social dicen que la población de más de 65 años aumentará en Canarias de 326.487 personas a 523.905 en los próximos años, un 60% de incremento. Que ni por asomo contempla el II Plan de infraestructuras para 4 años. Un plan que no va a ser un cambio necesario de modelo, que otras comunidades ya comenzaron y que Canarias se niega a realizar.
Canarias sigue siendo la comunidad autónoma con menos beneficiarios en relación con las personas potencialmente dependientes de todo el territorio español, la media es de 9,24 y nosotros nos encontramos en un 4,96. Esto clama al cielo, somos la peor comunidad y con menos servicios y servicios de poca calidad en atención domiciliaria, en residencias diurnas, en residencias de Medio y Alto Requerimiento, somos la comunidad que menos gestiona la dependencia, en este sentido Canarias no está integrada en la red de servicios sociales básicos, puesto que se incumple en todos los parámetros, Acceso, valoración, Elaboración de los Planes individuales de Atención, Seguimiento y Gestión de Servicios de proximidad. Lo peor, que nos hemos acostumbrado a ello, como no conocemos otra cosa, nos conformamos, ¿Y todo esto, quien lo está asumiendo en la actualidad?, pues las familias, principalmente las mujeres, que renuncian a su vida profesional, personal en la atención a sus mayores, en sus casas, sin apenas medios. El informe también menciona que lo preocupante en este sentido es que se reduce en la ayuda a domicilio ligeramente y las prestaciones económicas a los que cuidan de sus mayores se han reducido sustancialmente, el panorama entonces es desolador¡¡.
Los políticas económicas no contemplan el tercer sector como potenciador de empleos estables en Canarias, se desprecia el tercer sector como fuente económica y de empleo estable, en este sentido, Clavijo descartó voluntariamente del Fondo de Desarrollo para Canarias (FDCAN) la financiación a infraestructuras socio- sanitarias, como políticas que no contribuían al desarrollo social y económico, craso error o pensamiento liberal diría al respecto, porque hoy podríamos estar hablando de un revulsivo para iniciar la apuesta decidida por cambiar el modelo socio-sanitario, un modelo estable que podría generar miles de puestos de trabajo, en su lugar seguimos haciendo planes de empleo de 3 meses y 6 meses de ese fondo , que no dejan de ser pan para hoy y hambre para mañana.
Asistimos a la mediocridad de nuestros gobernantes, Algunos políticos están más concentrados en discursos grandilocuentes y más buscando perpetuarse en el sillón que en verdaderamente transformar la sociedad en más bienestar y calidad de vida a la ciudadanía. Que de eso se trata, señores¡¡¡.
Isabel Guerra
Psicóloga.
