-En primer lugar debo reconocer mi error y pedir disculpas porque en mi anterior artículo de esta serie ATRIBUÍ INDEBIDAMENTE A UN CONCIUDADANO, DON GUSTAVO CÁCERES ÁLVAREZ, responsable de TIC en Ashotel, LOS PROBLEMAS QUE, justamente tras abrir correos suyos, ESTABA TENIENDO EN MI ORDENADOR. Un experto de mi tienda-taller de informática me ha informado de que era casi imposible que tal como había sido nuestro intercambio de mails, don Gustavo tuviera responsabilidad alguna.
-Aunque el Sr. Cáceres no me ha pedido ninguna rectificación, quizá por no darle importancia o por no haber leído dicho artículo, DEBO RECTIFICAR ESPONTÁNEAMENTE POR RESPETO A LOS LECTORES, A MÍ MISMO Y, SOBRE TODO, A ESTE SEÑOR. Es muy injusto que una persona, que bastantes problemas tendrá como todos tenemos en esta vida, se vea públicamente culpabilizada sin motivo y sin razón.
Dicho eso, numeraré lo que sigue para mayor claridad.
1. Los lectores que quieran tener antecedentes o refrescar la memoria sobre esta serie de artículos y sobre otros correlacionados, pueden pinchar arriba, en mi nombre, donde podrán leerlos o releerlos. Sigamos, por tanto.
2. El último disparate del Gobierno de España ha sido pretender que tributen a la Hacienda española los extranjeros que se vieron forzosamente confinados contra su voluntad en España a raíz de la crisis del COVID. El Gobierno se basa en que al haber pasado más de 183 días en nuestro país debe considerárseles “residentes” y no lo que son, o eran: turistas. NINGÚN POLÍTICO CANARIO HA PROTESTADO NI TOMADO NINGUNA INICIATIVA PARA QUE SE CORRIJA ESTE ABUSO DE LEY, ESTE MALTRATO Y ESTE ZAPATAZO A NUESTROS VISITANTES.
3. En vez de favorecer nuestra recuperación económica mediante una rápida y progresiva recuperación de turistas desde el pasado mes de abril, el presidente de Canarias, y todos los políticos canarios de todos los partidos no han hecho sino entorpecer y poner trabas a quienes deseaban, desean y deseen en el futuro venir.
4. En efecto. El señor Angel Torres, para quedar bien con la plebe atenazada por un pánico irracional, se empecinó desde el principio en exigir tests en origen y destino a nuestros visitantes. No lo ha logrado, como se presuponía, y han pasado seis meses. MEDIO AÑO en el que las consecuencias de su terquedad están a la vista: poquísimos negocios hoteleros han podido reabrir, y la mayoría de los que lo hicieron han vuelto a cerrar o están a punto de hacerlo.
5. ADVERTÍ, en artículo publicado el 10 de abril en este diario, DE QUE no podíamos tirar piedras sobre nuestro tejado y que por tanto “NO DEBERÁ SER PRECISO NINGÚN TIPO DE CERTIFICACIÓN MÉDICA, NI SE ESTABLECERÁN TRABAS NI CORTAPISAS A LOS TURISTAS QUE VENGAN A NUESTRAS ISLAS A PARTIR DEL 1 DE JUNIO, si bien se aconseja a las personas de edad superior a 80 años, o a las que tengan dolencias graves (respiratorias, cardíacas y vasculares) que esperen hasta julio para realizar sus viajes”.
6. Como expliqué, mi postura se basaba entonces, y se basa, en, por resumir, lo que sigue:
a) La inmensa mayoría de los residentes en Canarias no se relaciona con los turistas y por tanto no nos afecta para nada que quienes vengan de vacaciones “traigan su virus a cuestas”. Esto no necesita demostración ni sesudas estadísticas ni inútiles “comisiones de estudio”. ¿Quiénes entre ustedes, señores lectores, se ha relacionado o ha hablado con algún turista en los dos últimos años?
b) Las personas que por su profesión deben relacionarse con los turistas (recepcionistas, guías, camareros, dependientes de comercio, etc.) están protegidos, como lo están también los turistas, por los protocolos (precauciones) que se toman en los hoteles y en los espacios cerrados.
c) Por lo demás, los turistas viven durante su estancia en Canarias un confinamiento “de facto”: su vida es, mayoritariamente, su hotel, su playa y los bares y restaurantes que frecuentan con sus compatriotas.
d) Por tanto, tomar la temperatura a la salida y llegada a los aeropuertos y usar mascarilla en los aviones era y es suficiente para tranquilizar tanto a los residentes en Canarias como a nuestros visitantes. Si era suficiente tomar la temperatura y llevar mascarillas en los supermercados adonde vamos todos ¿por qué vamos a poner impedimentos añadidos a quienes vienen a Canarias a dejar aquí su dinero? ¿ESTAMOS LOCOS O QUÉ? ¿Es que el virus que pueda traer un inglés, un alemán o un español no residente en Canarias es distinto al que ya muchísimos residentes canarios han cogido aquí?
e) Los “cagaditos” de otros países no iban a venir entre abril y julio, por muchas exigencias sanitarias que implementáramos…
f) …pero había ya entonces, y hay, centenares de miles de europeos saludables y sensatos que saben que es poco probable que se infecten y que aunque se infecten van a ser asintomáticos o tener molestias leves. Estas personas habrían venido sin dudar sin necesidad de exigencias sanitarias, y más aún si no las había porque lo que querían y quieren es disfrutar sus vacaciones en paz, sin cortapisas a la salida ni a la llegada en origen ni en destino y sin obligarlos a llevar mascarillas en sus paseos por nuestras playas, avenidas y núcleos turísticos y no turísticos.
g) La mejor propaganda que habríamos podido tener desde principios de mayo es que se comprobara que nuestros huéspedes nacionales e internacionales retornaban a sus ciudades de origen sin novedad. Eso es lo que hubiera ido animando a “los cagaditos” a venir, y lo que habría despejado cualquier duda futura en los gobiernos europeos.
h) En definitiva, nuestros políticos, y también las asociaciones hoteleras (pidiendo, dale que dale, PCR´s masivos) han fallado clamorosamente al no interpretar la variada personalidad de nuestros potenciales visitantes. Y en consecuencia, por su perreta con los PCR, no hemos tenido visitantes.
i) EL MAL ESTÁ HECHO pero la pertinacia en este y otros errores puede hundirnos definitivamente. ¿Qué hacer, por tanto?
j) Pues lo que hay que hacer, diga lo que diga “Madrid”, es abrir nuestras puertas de par en par a los turistas occidentales. Con excepción de China, España es, de los países “grandes”, donde las restricciones han sido más duras (por ejemplo, confinamiento larguísimo y mascarillas obligatorias desde que sales de tu casa hasta que vuelves). Todo para nada porque somos, exceptuando Perú, el país con más muertos por número de habitantes.
k) Los aduladores de las TV´s (TVE, A3, T-5, La Sexta, y de las televisiones públicas regionales) repiten uno y otro día que en USA y Brasil hay más fallecidos, sin aclarar que España tiene 47 millones de habitantes, mientras que Brasil tiene 212 y USA 383. Así, por ejemplo, el número de fallecidos por 100.000 habitantes es, en USA, 57, y en España 66.
7. Veamos la situación de los competidores de Canarias que han facilitado las cosas a sus turistas en vez de ponerles obstáculos, y cuyas economías van a sufrir muchísimo menos que la española. Y nada digamos de la situación socio-económica previsible en Canarias.
a) Turquía, 9´5 fallecidos por 100.000 habitantes.
b) Croacia, 6´5 fallecidos por 100.000 habitantes.
c) Egipto, 6 fallecidos por 100.000 habitantes.
d) Grecia, 3´5 fallecidos por 100.000 habitantes.
e) ESPAÑA, 66 fallecidos por 100.000 habitantes.
f) Canarias, 11 fallecidos por 100.000 habitantes.
8. Es decir, España tiene el triple de fallecidos por 100.000 habitantes que todos esos países juntos…pero el índice de Canarias no difiere grandemente del de nuestros competidores turísticos. Sin embargo, se han hecho las cosas mal por seguir perrunamente las pautas marcadas, antes y ahora, por el infausto presidente Pedro Sánchez con la aquiescencia del resto de los líderes nacionales: confinamiento y restricciones igual que en la Península, con la burla añadida de adelantar una semana, como una gran concesión, las fases de desconfinamiento en el Hierro y La Gomera, donde vive solamente el 1% de la población de nuestro Archipiélago.
9. El mentiroso de Pedro Sánchez había anunciado un desconfinamiento “asimétrico”, es decir, diferenciado. No lo fue. Los políticos canarios callaron, y callados siguen. POR ESO ESTAMOS COMO ESTAMOS.
10. SEGUIREMOS. Lo más grave está por comentar y denunciar. Mientras tanto, agradezco a los lectores y lectoras que pasen este artículo a sus amigos, parientes y compañeros. Los artículos anteriores los encuentran pinchando arriba en mi nombre, junto a la foto.
*Emilio de Fez Marrero es Licenciado en Filosofía y Letras. Ex–profesor de Bachillerato, COU y Escuelas Oficiales de Idiomas. Intérprete Oficial de Inglés titulado por la Secretaría de Estado para el Turismo.
