Lo que hay que tener en cuenta para operar con bonos
Para todos aquellos que, en momentos como los que estamos viviendo, no sepan qué hacer con sus ahorros, nosotros nos vamos a permitir la licencia de hablar sobre diferentes posibilidades para ello y lo que se necesita para tener éxito en este ámbito.
Los bonos
Invertir en bonos es una de las soluciones que nos permite obtener rentabilidad a nuestros ahorros.
Un bono es un acuerdo entre un prestatario y un prestamista en el que el prestatario finanza un proyecto emitiendo un bono. Los bonos (bonos del tesoro, títulos, etc.) suelen estar emitidos por los gobiernos y es lo que, comúnmente, se denominan los bonos del Estado.
El emisor de un bono, o "prestatario" fija el tipo de interés que se le paga después al inversor. En el momento del vencimiento de este bono, al inversor se le reembolsa también su inversión inicial.
A diferencia de las acciones de bolsa, no hay un mercado centralizado para comprar y vender bonos. El mercado de bonos es un mercado ‘extrabursátil’ (over-the-counter, OTC) ¡que es mucho más grande que el mercado de valores! También es importante tener en cuenta que, como trader, es decir, como agente que quieres ser en el mercado de valores, no compras o vendes directamente el bono, sino que simplemente estás especulando sobre cómo se apreciará o depreciará con el tiempo el valor del bono.
Factores que influyen en el precio de los bonos
El precio del bono se ve afectado por la actitud del mercado, que es cambiante, y por el panorama económico. Los factores más influyentes en el precio son los tipos de interés, las rentabilidades y la calificación del bono. Sin embargo, comprender la relación entre el precio de un bono y los factores externos es un tanto complejo.
Estudiemos como ejemplo los tipos (o tasas) de interés
Supongamos que un gobierno decide subir los tipos de interés debido a la inflación. Cuando esto sucede, los tipos sobre el bono suben, lo que quiere decir que la rentabilidad, o cantidad que se le paga al inversor, caerá. A su vez esto provoca que el precio del bono baje, ¡porque vale menos para el inversor original!
Si un trader, o agente, especula con que va a haber una subida de tipos, entonces vendería el bono esperando que el precio caiga. Por consiguiente, en el ejemplo previo, el trader, o agente, habría sacado un beneficio.
Rentabilidad de los bonos
En la Bolsa influyen infinidad de variables, y aunque la rentabilidad de los bonos es una de las más importantes para el corto y medio plazo, no es la única. Puede suceder que otros datos de signo contrario compensen el movimiento de los bonos.
También hay que tener en cuenta que la rentabilidad de los bonos, a grandes rasgos, es la suma de la inflación y el PIB estimados para el futuro. Y que crezca el PIB es bueno, pero que crezca la inflación es malo.
Cuando se compra un bono a un tipo de interés fijo se cierra una rentabilidad determinada que, excepto si el emisor hace default, el inversor ganará por mantener el bono hasta su vencimiento.
En definitiva, mover tu dinero puede ser muy rentable si consigues hacerte, como trader, con el asesoramiento oportuno y los conocimientos necesarios para ello.