Se complica aún más el rescate de Julen: el túnel vertical debe ser ensanchado para que entren los mineros
Una de las mayores dificultades es encajar la ventana desde la que los especialistas de la Brigada de Salvamento Minero de Hunosa comenzarán a cavar
Las tareas previas a la ejecución de la excavación horizontal que desarrollarán los mineros para rescatar a Julen, el niño de dos años que cayó hace más de una semana en un pozo de 25 centímetros de diámetro y 110 metros de profundidad en Totalán (Málaga), se retrasarán tras las nuevas dificultades técnicas que se han encontrado en el proceso.
El equipo de rescate ha decidido ensanchar el túnel vertical ante las dificultades para que los tubos del encamisado pasen de los 40 metros de profundidad. Ante el riesgo de que puedan quedar atascados, se ha decidido sacarlos para preservarlos en perfecto estado, han informado fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Málaga.
Se han barajado varias opciones y se ha optado por la que se considera más segura, que consiste en rellenar el túnel con tierra fina y volver a perforarlo con un engrosamiento un poco mayor, según dichas fuentes. No han querido dar previsiones de las horas que podría retrasarse el rescate.
La brigada minera, que requiere unas 24 horas para practicar la galería, ha acudido este martes al puesto de mando del operativo de rescate de Julen y espera el momento de actuar.
Los operarios han empleado 55 horas para la finalización de la galería vertical de 60 metros de profundidad, lo que supone una velocidad de 1,1 metros a la hora, que se ha visto ralentizada en ocasiones por la gran dureza de los materiales. Como se ha venido indicando estos días por parte de los técnicos, se está ejecutando, a contrarreloj, una auténtica obra de ingeniería civil.