¿Cómo puedo formar a mis trabajadores de forma gratuita?
Los trabajadores de una empresa son el recurso más valioso, ya que en gran medida la producción depende de ellos. A la hora de mejorar sus condiciones, muchas empresas optan por el incremento de salario, dietas o plus de transporte; no obstante, cada vez es más frecuente el uso del crédito formativo, ya que todas las empresas disponen de él por el simple hecho de abonar los seguros sociales y que pueden utilizar estas cuantías como medio de pago en la contratación de un curso bonificado.
¿Qué es la formación programada?
Si te interesa la contratación de estos cursos te preguntarás qué es la formación programada, todas las empresas disponen de un crédito que se obtiene por las aportaciones que hacen empresa y trabajador a la Seguridad Social gracias a la iniciativa de la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (FUNDAE). Las empresas podrán utilizar esos créditos para proporcionar formación a trabajadores, mejorando el nivel académico y experiencia profesional del trabajador, además de aumentar la productividad y conseguir trabajadores de mejor calidad para la empresa —son las relaciones llamadas win to win porque ambas partes ganan en el acuerdo—.
La mejor opción, antes de utilizar tu crédito de formación, es dejarlo en manos de profesionales con experiencia reconocida como por ejemplo la escuela de negocios INESEM Business School, ya que te asesorarán desde el inicio del procedimiento hasta el final; primero calculan el importe disponible en tu empresa para utilizar en el año en curso, luego te apoyarán en la toma de decisiones a la hora de elegir el tipo de curso a realizar y se encargarán por ti de todos los trámites administrativos, aunque lo mejor es que contactes con ellos directamente para obtener más información.
Ventajas al usar tu crédito formativo
Son múltiples las ventajas a la hora de utilizar la formación bonificada, bonifica tu formación con INESEM y disfruta de todas ellas. Te comentamos algunas de las más importantes:
- Las empresas obtienen más compromiso de sus empleados, ya que los valoran como un recurso a largo plazo y no solo para salir del paso.
- Los empleados estarán más actualizados en sus funciones directas e indirectas, generando una mayor producción para la compañía, mejorando su cualificación y, con esto, obteniendo una mayor motivación en su puesto de trabajo.
- Aunque no es un aumento en sus honorarios profesionales, este tipo de acciones se consideran salario emocional, mejorando las condiciones de los trabajadores gracias al desarrollo personal y profesional.
- La imagen corporativa interna mejorará considerablemente, proporcionando un mejor ambiente de trabajo que desemboca en unos empleados que valoran más a la empresa.
- Por norma general son totalmente gratuitos, ya que el coste de la factura se regularizará con una bonificación en las cuotas de la Seguridad Social. Además, estos créditos tienen un vencimiento normalmente de un año, por lo que las empresas que no lo utilicen al finalizar el ejercicio los perderán sin la posibilidad de recuperarlos.
Las empresas que no utilizan la formación bonificada para sus trabajadores no se han informado lo suficiente, ya que no supone coste económico para la compañía gracias al uso del crédito formativo y aporta ventajas para ambas partes sin ningún contra.
