El Hospital Parque incide en la importancia de la vacunación infantil para prevenir enfermedades graves

“El seguimiento del calendario de vacunación infantil es una herramienta clave para prevenir enfermedades peligrosas y evitar sus graves secuelas”, afirma la pediatra de Hospital Parque Zárate Fátima Delgado.

 Señala que en Canarias existe una importante sensibilización en este tema, con un índice de vacunación infantil del 95%, superando en cinco puntos la media nacional.

 Explica que las vacunas juegan un importante papel en la prevención de enfermedades infectocontagiosas, al permitir que el organismo desarrolle defensas específicas contra ellas, lo que genera una inmunidad ante futuros encuentros con el microbio agresor.

 Este procedimiento resulta especialmente relevante en el caso de los niños, un segmento de población cuyo sistema inmunológico está en proceso de maduración, al igual que algunos órganos, lo que hace que sean más vulnerables al contagio y a padecer enfermedades.

 Añade que uno de los principales riesgos que se corre al no administrar las vacunas se centra en la aparición de enfermedades que estaban casi erradicadas y que pueden provocar importantes secuelas e incluso poner en peligro la vida.

La pediatra de Hospital Parque Zárate señala que, pese a que las vacunas son medicamentos muy seguros, sometidos a estudios previos estrictos y a un proceso de vigilancia continuo, deben ser puestas tras un examen general del niño, con el fin de descartar procesos infecciosos o febriles o que esté inmunodeprimido. En estos casos, apunta, es necesario retrasarlas hasta que mejore su salud.

Añade que las vacunas deben administrarse por profesionales sanitarios y bajo un control de vigilancia durante los primeros 20 minutos, con el fin de descartar que se produzcan reacciones alérgicas.

 No obstante, al igual que ocurre con otros medicamentos, pueden producir efectos secundarios leves, como dolor en el lugar del pinchazo, fiebre o erupción cutánea.

 Fátima Delgado explica que el programa de inmunización recomendado por la Asociación Española de Pediatras incluye 15 tipos de vacunas, que se comienzan a administrar a partir de los dos meses y que posteriormente requieren dosis de refuerzo. Este es el caso de la de la polio, difteria, tétanos, tosferina, haemofilus influenzae, hepatitis B, neumococo, rotavirus, así como la meningitis C y B.

 A esta se sumarían también la vacuna contra el sarampión, la rubeola y la parotiditis, así como la varicela y las del virus del papiloma humano.