El nuevo servicio de cercanía de la Policía Local realiza 363 actuaciones para mejorar la seguridad y la convivencia en los barrios en lo que va de año

El nuevo servicio de cercanía de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria, denominado Policía de Participación Ciudadana, ha realizado en lo que va de año 363 actuaciones en los cinco distritos para mejorar la calidad de vida en los barrios de la ciudad a través de la mediación, dando respuesta a las demandas vecinales en diversos asuntos como salud pública, tráfico, limpieza o menudeo de drogas.

El alcalde, Augusto Hidalgo, ha realizado este miércoles un recorrido con el grupo policial y vecinos de El Batán para analizar las peticiones de los residentes del barrio en materia de convivencia y tráfico en las que puede mediar la Policía Local, así como comprobar el funcionamiento del nuevo grupo policial creado recientemente para mejorar la comunicación entre ciudadanía y Ayuntamiento.

En el encuentro también han estado presentes el concejal de Seguridad y Emergencias, Josué Íñiguez, y el edil de Participación Ciudadana y del distrito Vegueta-Cono Sur-Tafira, Prisco Navarro y el presidente de la Asociación de Vecinos Batán.

“La Policía de Participación Ciudadana, que comenzó su andadura hace cuatro meses es una apuesta del Ayuntamiento por un nuevo modelo de policía de proximidad para dar respuesta a muchos de los problemas de convivencia y tráfico que se generan en los barrios, resolver incidencias y garantizar el cumplimiento de la normativa municipal”, ha asegurado Augusto Hidalgo.

Una de las características principales de este servicio es el diálogo como herramienta para garantizar la convivencia y el entendimiento.

“No todos los problemas se pueden resolver con multas, sino a través de la mediación y el diálogo”, ha dicho el alcalde, quien ha explicado que “además de resolver conflictos vecinales, este servicio tiene el objetivo de dar una respuesta efectiva a las incidencias o problemas que se puedan encontrar los vecinos en las calles relacionadas con las infraestructuras, la limpieza o el tráfico”.

En este sentido, el servicio mejora la atención a la ciudadanía, manteniendo una relación permanente con las asociaciones vecinales, comerciales y los colectivos representativos.

La Policía de Participación Ciudadana, que trabaja en colaboración con los distritos y los diferentes servicios municipales, está integrada por agentes que ejercen de enlace entre la ciudadanía y el Ayuntamiento para abordar los problemas que surgen en los barrios y que son competencia municipal.

Por su parte, Josué Íñiguez ha señalado que la apuesta por este servicio “actualiza el modelo tradicional de policía de barrio, manteniendo el patrullaje de proximidad por parte de las unidades uniformadas y complementándolo con este servicio especializado”.

Asimismo, ha indicado una de las principales ventajas que presenta el grupo es que los policías también trabajan de paisano, lo que permite realizar labores de investigación de manera más eficaz y dar una respuesta más efectiva a las diferentes situaciones conflictivas que se pueden encontrar.

Prisco Navarro ha destacado la importancia de esta iniciativa “que nos permite dar respuesta a una demanda de los colectivos vecinales y asociaciones a través de un nuevo lazo de unión con el que la ciudadanía gana mucho porque nos permitirá resolver mucho más rápido los problemas gracias a una comunicación más directa y efectiva”