Cambio radical en la estrategia de Israel: estudia un «contagio masivo» y eliminar las restricciones

Israel ha sido uno de los países que se ha puesto como ejemplo de gestión de la pandemia del coronavirus. Fueron los primeros en inmunizar a su población con la vacuna, también los que aprobaron la tercera dosis, y ahora la cuarta. Pues bien, su estrategia podría dar un giro de 180 grados y apostar por dejar de un lado las restricciones y dejar que la variante Ómicron infecte a todo el mundo y superar así la pandemia.

Ómicron está dejando un número de contagios sin precedentes. La nueva variante del coronavirus es extremadamente contagiosa pero lo cierto es que es mucho más leve que otras. Sus síntomas, en la mayoría de casos, son similares a un catarro común y esto para muchos expertos ser una señal de que el fin de la pandemia está cerca. Si el covid ahora es más débil podríamos convivir con él como lo hacemos con la gripe.

Esto es lo que le ha hecho pensar a Israel en cambiar su estrategia frente al coronavirus. Las autoridades sanitarias del país valoran promover un «modelo de contagio masivo» en vez que imponer más restricciones. De esta manera se conseguiría la inmunidad colectiva de manera natural y no serían necesarias más dosis ni más limitaciones.

Este modelo sólo ha sido planteado por Ómicron. El resto de variantes no permitían hacer este estudio ya que su tasa de mortalidad era mucho mayor. Ómicron provoca síntomas más leves y por eso podría ser la variante ideal para que todos nos contagiemos y superemos una pandemia que dura ya casi dos años.

Los contagios con Ómicron se están multiplicando en todo el mundo. Pero la buena noticia es que los ingresos hospitalarios y los fallecimientos no están creciendo en proporción.

Cuarta dosis de la vacuna

La última medida ya aprobada por Israel ha sido la cuarta dosis de la vacuna contra el coronavirus para las personas inmunodeprimidas. La decisión fue tomada por la explosión de Ómicron y ante el temor de que este sector de la población fuera más vulnerable.

Como pasó con las otras dosis, no se descarta extender esta cuarta inoculación al resto de la población cuando este sector esté vacunado. Israel ya ha hecho los ensayos clínicos de la cuarta dosis de refuerzo de la vacuna de Pfizer con 6.000 personas, entre las cuales hay 150 profesionales de su personal médico, que recibieron la tercera dosis en agosto y cuyos índices de anticuerpos han descendido.