El Iberostar Tenerife logra un histórico triunfo
El Iberostar Tenerife ha culminado una década de progresión continua que le ha llevado desde la división de bronce del baloncesto español hasta la consecución de su primer título europeo, durante una temporada en la que ha sido líder de la Liga Endesa durante varios tramos de la competición.
La victoria tinerfeña fue la guinda de un evento en el que concursos de mates, acrobacias imposibles de las animadoras, espectáculos de iluminación y actividades en los alrededores del pabellón, que en la jornada inaugural no se pudieron celebrar como consecuencia de la alerta meteorológica, deleitaron a los aficionados al baloncesto en la isla de Tenerife.
Más de setenta periodistas acreditados de diversos países europeos cubrieron la primera edición de la Liga de Campeones de Baloncesto, una competición impulsada por la FIBA con el objetivo de competir con la poderosa Euroliga.
En la isla se dieron cita aficionados turcos, franceses y turcos, que no protagonizaron ningún incidente, pero sí algunas anécdotas en las que destacó la deportividad, como cuando toda la afición que llenaba el Santiago Martín se arrancó a corear el nombre del Venecia, cuando este equipo perdía de veinte puntos en el último cuarto del partido por el tercer y cuarto puesto.
El conjunto aurinegro y su afición celebrarán el título durante la noche de este domingo, pero con una fiesta que no debe dejar resaca en el equipo de Txus Vidorreta, porque el jueves volverá a vestirse de corto para recibir al Baskonia, con buena parte de las opciones canarias de conseguir factor cancha en la primera eliminatoria de los play off de la Liga Endesa en juego.
El Iberostar Tenerife ha mantenido una proyección constante durante los últimos veinte años que le ha llevado de luchar por la permanencia en la división de bronce del baloncesto español a disputar la fase final de una competición europea con apenas una década de diferencia.
Tras un proceso de refundación tras el frustrado intento de unir en una misma entidad a todos los representantes tinerfeños en la élite, el club ha mantenido una línea de crecimiento continua desde que, en 1998, retornó al baloncesto nacional para competir en la Liga EBA.
Cuatro años en Liga EBA, cinco temporadas en la LEB 2 y otras cinco campañas en LEB Oro fueron los cursos que necesitó el conjunto aurinegro para volver a la ACB, una competición de la que fue uno de sus fundadores en la década de los ochenta.
Fue en la temporada 2011/2012, en la que el CB Canarias terminó primero en la Liga LEB y se proclamó campeón de la Copa del Príncipe, cuando los laguneros lograron firmar el ascenso a la máxima categoría.
El ascenso no llegaría de forma automática, puesto que en primera instancia el club tuvo que renunciar al no poder conseguir los recursos económicos para hacer frente al canon de la ACB, aunque finalmente se hizo con una plaza en la élite al ocupar el hueco que dejó libre por motivos económicos el Alicante.
Desde entonces, el Iberostar Tenerife ha firmado cinco temporadas consecutivas en la ACB, en las que no ha sufrido apuros para mantener la categoría y los puestos que daban acceso para la Copa del Rey o los 'play off' por el título estuvo más cerca que la zona roja de la clasificación.
En la temporada 2013/2014 el CB Canarias logró clasificarse para disputar la Copa del Rey de Málaga, de la que fue eliminado en la primera ronda a manos del FC Barcelona.
En las dos temporadas siguientes los tinerfeños se quedaron cerca de disputar la competición copera o las eliminatorias por el título, antes de afrontar la que ya es la mejor temporada en la historia del CB Canarias.
En el actual curso, en Iberostar Tenerife se hizo con una plaza en la Liga de Campeones de Baloncesto, competición impulsada por la FIBA en la que fue avanzando rondas hasta llegar a la final a cuatro que se disputará este fin de semana en la isla.
Los canarios también lograron clasificarse para la Copa del Rey como cabezas de serie y ya han certificado su presencia en las eliminatorias por el título y, por delante, tienen el reto de conseguir el factor cancha en la primera ronda de los 'play off'.