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El I Foro de Gobernanza de Gran Canaria pone al archipiélago en la tesitura de elegir entre “ser puente o valla”

Activistas de Senegal, Mauritania, Congo, Mali y Burkina Faso reivindicaron el papel de la sociedad civil africana por sus grandes avances

Canarias Noticias - 09/04/2019

El I Foro Internacional “Gobernanza, movimientos sociales y participación ciudadana”  organizado por el Cabildo de Gran Canaria arrancó anoche con una mesa redonda en la que participaron activistas de Senegal, Mauritania, Congo, Mali y Burkina Faso y que fue moderada por el periodista Pepe Naranjo, que hizo un llamamiento para que Canarias se convierta en un “puente” entre África y Canarias y no en una “valla”. 

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, dio la bienvenida a los participantes en el Foro y aseguró que “la única solución para la crisis económica y política que se vive desde 2008 pasa una mejora de la democracia a través de la participación”.  Por ello, Morales aseguró que estaba “encantado” de cederle el protagonismo del Foro a las organizaciones sociales y ciudadanas, de la misma manera que durante el mandato el Gobierno insular ha procurado que la ciudadanía tuviera un papel destacado en su acción. 

Para la consejera de Participación Ciudadana, María Nebot, la gran cantidad de organizaciones sociales que se dan cita en el Foro “son una muestra de la vitalidad tanto de la sociedad canaria como de los países africanos representados” y deseó que el encuentro sea “el germen de una agenda compartida de democracia, solidaridad e igualdad, que conviertan a Canarias y África en una referencia internacional participación ciudadana”.

La esclavitud, “habitual” en Mauritania

La encargada de abrir el debate fue Aminetou Ely, defensora de los derechos humanos en Mauritania, perseguida por los terroristas islámicos, que denunció que en su país “se practica la esclavitud de manera habitual, pese que el discurso oficial niega la existencia de esa realidad”. Asimismo explicó que ha reclamado una investigación sobre la matanza de población civil en la frontera con Mali, petición que el gobierno militar de Mauritania ha rechazado. 

La activista maliense Fatouma Harber, creó en 2013 la plataforma “doniblog” con otros 30 blogueros del país para la defensa de los derechos humanos, la democracia y la denuncia de la censura en Mali. Fatouma defendió que “pese a que internet es caro y que su penetración en el país es todavía limitada, el papel de los ciberactivistas está consiguiendo movilizar a la población en contra de la falta de democracia y del gobierno”.  

El movimiento “Balai Citoyen” (escoba ciudadana) tuvo un papel fundamental en el derrocamiento, después de 27 años de gobierno, de Blaise Compaoré, en Burkina Faso. Para Nebon Babou, representante en España de este movimiento “es un hecho inédito que una insurrección ciudadana consiga echar a un dictador que tenía el apoyo de Francia”. Babou reivindicó el papel de la juventud africana que demanda cambios y se está coordinado a nivel continental. 

La inmigración, origen en la mala gobernanza de origen

Parte de la inmigración existe porque hay mala gobernanza en sus los países de origen. Es lo que defiende la congoleña Nicole Ndongala, presidenta de la asociación “Karibú, amigos del pueblo africano”, que vive exiliada en Barcelona tras tener que abandonar su país por amenazas debido a su denuncia de las situaciones de violencia y exclusión de sufren las niñas y mujeres del Congo. Ahora ayuda a los inmigrantes africanos de España y reivindica el papel de la diáspora africana.  

Mamadou Día llegó a España en un cayuco en 2006, tras una travesía de 6 días. Años después regresó a Senegal y fundó la asociación “Hahatay Sonrisas de Gandiol”, que lleva a cabo procesos de participación comunitaria que están transformando su localidad. Día narró cómo ha construido una escuela infantil con botellas de plástico reciclado y ha creado un espacio de intercambio en el que jóvenes europeos acuden para conocer la realidad de los jóvenes senegaleses. Ahora está trabajando en la creación de un centro cultural. 

Aminetou, Fatouma, Nicole, Mamadou y Nebon coincidieron en reivindicar la emergencia de la sociedad civil africana, de los movimientos sociales y de la participación ciudadana así como de crear espacios de intercambio de experiencias para “derribar las fronteras mentales” y promover un mayor conocimiento mutuo, porque a pesar de estar tan cerca “África sigue siendo muy desconocida para los canarios”. 

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