La incineración se consagra como opción funeraria tras un fallecimiento
No hace tantos años que, en España, la única opción disponible tras un deceso era el tradicional funeral de cuerpo presente y la posterior inhumación de la persona fallecida.
Sin embargo, las tornas han cambiado en las últimas décadas y la incineración está ganando adeptos a pasos agigantados. De hecho, según los datos que maneja Interfunerarias, el porcentaje de fallecidos incinerados en 2020 fue de algo más del 45 %.
Más incinerados en las ciudades que en las poblaciones pequeñas
Cierto es que la pandemia del coronavirus ha influido en que el porcentaje de incineraciones se haya incrementado ese año, pero también lo es que la tendencia al alza de las incineraciones ya viene de muy lejos.
De hecho, en 2005 (primer año del que existen estadísticas del número de incineraciones) se registró un porcentaje de incineraciones de tan solo el 16 %. Desde entonces, la tónica ha sido un aumento ininterrumpido del número de incineraciones.
Un dato curioso es que se incinera menos en las zonas rurales que en las urbanas. En las capitales de provincia, el porcentaje se sitúa en torno al 60 % mientras que en la España rural roza el 40 %.
Se estima que esta diferencia de porcentajes no es solo una cuestión de preferencias, sino que también influye que en las zonas rurales la disponibilidad de instalaciones funerarias de incineración es menor.
Una tendencia que se observa a escala mundial
La tendencia alcista es universal, aunque los porcentajes de personas que optan por la incineración varía enormemente según la idiosincrasia de cada país. A modo de ejemplo, el 99 % de los ritos fúnebres en Japón se celebran una vez incinerado el cadáver.
Y en Europa, Suiza es el país que ocupa el podio de honor: algo más del 85 % de los ciudadanos suizos optan por la incineración.
La previsión a corto plazo para España
Las previsiones de PANASEF (Asociación Nacional de Servicios Funerarios), basada en el historial estadístico de los últimos años, apuntan a que en 2025 el porcentaje de incineraciones en España superará el 60 %.
¿Qué ventajas ofrece la incineración?
Según los responsables de la oficina funeraria en Las Palmas de Interfunerarias, en muchos casos el coste total del enterramiento resulta ser menor, pese al gasto económico adicional que supone la incineración.
El motivo es que una urna cineraria ocupa muy poco espacio, lo que puede hacer innecesario adquirir una nueva tumba o nicho. Los familiares también pueden optar por esparcir las cenizas del difunto en los lugares en que está permitido hacerlo.
Además, cada vez existe más conciencia acerca de que la incineración es un procedimiento más higiénico y respetuoso con el medioambiente que la inhumación directa.
En adición, también existe una motivación psicológica que afecta tanto a quienes toman en vida la decisión de ser incinerados como a los familiares que se ven en la tesitura de elegir entre inhumación de cuerpo presente o incineración. Y es que la incineración evita que se presenten pensamientos negativos y desagradables, relacionados con la degradación orgánica de nuestro propio cuerpo o del de algún ser querido.
