Un buen amigo me ha comentado muy preocupado que del neoliberalismo todavía no hemos hablado lo suficiente. Como estoy totalmente de acuerdo con él, voy a escribir las siguientes líneas.

De verdad, no sé por dónde empezar. Pero por algún sitio hay que hacerlo. Hemos padecido los españoles un largo periodo electoral que acabó teóricamente.

La Ilustración surgida en Europa introdujo la creencia de la idea de progreso, entendido como el continuo mejoramiento de las condiciones de vida en el futuro a nivel político, social y económico, al liberar la razón del yugo de la tradición y de

Según todos los indicios, es lo que nos venden la mayoría de los medios de comunicación aragoneses, el protagonismo futuro del partido Cs en la política aragonesa, tanto en el gobierno de la DGA como en el Ayuntamiento de Zaragoza va a ser clave a

Alardean conspicuos y egregios tertulianos, afamados académicos y la mayoría de nuestra clase política de que España disfruta de una democracia ejemplar. Lo más grave es que además lo dicen plenamente convencidos.

En este nuevo aniversario, el 78, de la II República parecen pertinentes algunas reflexiones de Manuel Azaña, el personaje más representativo de este régimen político.

Antonio Gramsci decía dirigiéndose a las izquierdas: ““Instruíos, porque necesitamos toda nuestra inteligencia; conmoveos, porque necesitamos todo nuestro entusiasmo y organizaos, porque necesitamos toda nuestra fuerza”.

Intuyo que los dirigentes de la UE todavía no se aperciben de su situación crítica. Su respuesta en lugar de  más Europa, debería ser una Europa mejor.

En el neoliberalismo las élites se sirven del miedo para someter a la gran mayoría de la población.

Tengo un sueño: que, por fin, un presidente de un gobierno español tenga las agallas suficientes para poner fin al silencioso mercadeo de armas…