El Tenerife da la primera sorpresa

La Copa, un torneo abonado a las sorpresas, no tardó este año en dejar la primera sobre la cancha. El Iberostar Tenerife se deshizo del campeón de la ACB. Adiós a un Valencia Basket lastrado por las lesiones que deja Las Palmas a las primeras de cambio. Versión gris la del equipo de Vidorreta, que echó de menos a sus líderes ante un gran conjunto canario.

Le costó a los dos equipos sacudirse la tensión, pero fue el Valencia el que antes lo consiguió. Dominaba con margen estrecho el conjunto de Vidorreta, asentado en la alargada figura de Pleiss y la contundencia de Thomas, aunque los canarios se mantenían a la zaga. Paso lento, pero seguro. Tobey y su dominio bajo el aro mantuvo la distancia bajo control hasta que se entonaron el resto de sus compañeros. Apareció Vasileidis, que con su corazón y su acierto exterior elevó los decibelios en un, por entonces, alicaído Gran Canaria Arena.

El choque se convirtió en un toma y daca. Un duelo de ida y vuelta en el que se limitaban los daños. Echaba de menos más fluidez el Valencia, que ha llegado a la Copa sin tres de sus directores de orquesta -Diot, Vives y Van Rossom-, aunque su calidad le bastaba para mantener el tipo antes del descanso (36-36).

Fue en el tercer cuarto cuando comenzaron a notarse esas ausencias. Al atasco ofensivo del Valencia le respondió el Tenerife con un parcial de 8-0 que le dio su primera ventaja importante en el partido (44-51, min. 25). Sufría el Valencia, incapaz de contener la creatividad de San Miguel (8 asistencias) y la falta de puntería de sus exteriores. Respondió a esa sequía Green, autor de 9 puntos consecutivos que devolvieron la tranquilidad a la afición naranja (55-57, min. 30).

Aún así, el campeón de la ACB estaba lejos de su mejor versión. Renqueante San Emeterio y con Dubljevic demasiado apagado, el Tenerife comenzó a amasar una ventaja preocupante para los naranjas (63-71, min. 37).

Tiró de épica el Valencia, buscando aire en los brazos de Dubljevic. Llegó a ponerse a tres puntos con medio minuto por jugarse (70-73), pero esta vez no hubo milagro y el Tenerife se hizo con el primer puesto de semifinalista de la Copa para mantener vivo su sueño de ser campeón.