Las Jornadas del Paisaje de Gran Canaria apuestan por la implicación ciudadana para el éxito de la gestión

La implicación ciudadana en la gestión del paisaje resulta fundamental para su éxito porque permite enriquecer las decisiones gracias al cruce de miradas con los expertos y al logro de resoluciones colectivas que, por tanto, también pertenecerán a la ciudadanía y las hará suyas, además es una excelente herramienta para aumentar la autoestima de la población gracias al orgullo de pertenencia al territorio, por ese motivo fue uno de los temas tratados hoy en las IV Jornadas del Paisaje de Gran Canaria.

Y es que estas Jornadas, inauguradas por la consejera de Política Territorial y Arquitectura del Cabildo, Inés Miranda, y el concejal de Promoción Económica y Turismo de Las Palmas de Gran Canaria, Pedro Quevedo, ponen el foco en la valorización del paisaje en la sociedad y en las sinergias compartidas con el turismo.

En este sentido, Miranda destacó que el planeamiento, el territorio y el paisaje tienen que ir de la mano con la sociedad, y que estas Jornadas son esenciales para el proceso de concienciación y para conseguir un paisaje de excelencia, fundamental también para el desarrollo del turismo. 

Para destacar la importancia de la implicación ciudadana, Pere Sala, director del Observatorio del Paisaje de Cataluña, explicó varias de las acciones que han contado con la colaboración de la sociedad, como la elaboración de catálogos y cartas de paisajes, un plan de paisaje transfronterizo en los Pirineos, y especialmente la candidatura del Priorat como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. 

Sala considera esencial la cooperación de la ciudadanía para que conozcan sus paisajes y su importancia, y para que tomen conciencia. “El paisaje se puede ver de muchas formas, pero es fundamental la mirada colectiva y solo se puede trabajar con la gente”, puntualizó. Además, asegura que aumentar el sentido de pertenencia a un territorio es una de las formas de generar proyectos. Y puso como ejemplo el proyecto ‘Wikipedra’, una base de datos ciudadana para hacer un inventario de los paisajes y del patrimonio, que ha logrado en siete años más de 20.000 elementos inventariados.

En la misma línea, la de la colaboración de la población, ahondó Víctor Quevedo, arquitecto y coordinador de la Unidad del Paisaje del Cabildo de Gran Canaria, quien aseguró que si el pueblo no participa será cada vez más difícil la gestión del paisaje. Por ese motivo, explicó que la Institución insular iniciará una campaña de concienciación ciudadana para animarla a que sume a las acciones de las administraciones.

Quevedo hizo también un repaso de las acciones realizadas y las previstas del Observatorio, y explicó los proyectos que están redactando o en licitación incluidos en los planes directores para la regeneración paisajística, 22 de ellos específicos en la GC-1 y  7 en la GC-2 con una inversión de 7,1 millones de euros, además de la retirada de las vallas publicitarias y una actuación integral de limpieza en ambas autovías con 81 intervenciones para adecentar 352.000 metros cuadrados. 

Limpiar casi 900 grafitis costará 2,6 millones de euros

Los grafitis son uno de los temas que abordan estas Jornadas y Víctor Quevedo explicó que el Cabildo ya ha planificado dos proyectos integrales de limpieza con un desembolso de 2,6 millones de euros para eliminar 861 pintadas en una superficie de 13.000 metros cuadrados en los márgenes de la GC-1 y la GC-2. 

En ese sentido, Inés Miranda puntualizó que es necesario debatir para encontrar opciones y que los grafiteros puedan mostrar su arte de una forma armonizada y sin erosionar el paisaje. 

Para ello, una mesa de debate con expertos abordó tanto el tema de los grafitis como el de las vallas publicitarias y las escombreras con la participación de Pere Sala, Marta García y Francisco Leiva del Grupo Aranea, Rafael Molina de la Asociación Defensa del Árbol y el Paisaje, Néstor García, grafitero y Doctor en Historia, y Nieves Martín, directora general de Edificaciones y Actividades del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. 

El paisaje en la nueva Ley del Suelo

Por su parte, el catedrático Francisco Villar explicó las medidas relacionadas con el paisaje que recoge la nueva Ley del Suelo, un borrador que él coordinó. Detalló que existen dos modelos de intervención desde la legislación, uno es un conjunto de planes separados del resto que ordenan el paisaje, y otro, el que integra el paisaje como un contenido más en los instrumentos de ordenación territorial y urbanística. Y  es este último modelo por el que ha optado la Ley del Suelo, para que el paisaje sea un elemento transversal del planeamiento insular. 

Villar detalló también algunas de las novedades, como por ejemplo, que establece una multa de entre 6.000 y 60.000 euros para quienes incumplan la obligación de conservación de los bienes, como los invernaderos abandonados que jalonan las autovías y autopistas de Gran Canaria.  
 
Por otro lado, el arquitecto municipal de Guía, Juan Luis Monzón, abordó las edificaciones residenciales en los espacios naturales del municipio y las actuaciones llevadas a cabo por el Ayuntamiento para censar desde 1997 las construcciones sin licencia, unas 860, y para trabajar en su regularización, muchas de ellas ya incluidas en el Plan General de Ordenación de 2017.

Monzón explicó que más de 500 ya están en suelo urbano y en asentamientos y casi 300 forman parte de un catálogo de viviendas en el que trabaja el Consistorio para solventar su integración en el territorio a través de medidas correctoras. 

Sin invadir el paisaje 

Por su parte, los arquitectos Flora Pescador y Vicente Mirallave, del estudio MPCT, hicieron un repaso por los ejemplos cercanos de arquitectura en el paisaje en espacios libres en Gran Canaria, como las intervenciones realizadas en San José del Álamo, en el interior del Barranco de la Ballena, en los jardines del campus universitario. También hicieron hincapié en la integración de subestaciones eléctricas en el paisaje. 

En la misma línea intervinieron las arquitectas Elsa Guerra y Noemí Tejera, de Arquitectura Anca, que expusieron dos proyectos en Tenerife. Uno de ellos es la mejora del Paseo de Agatha Christie y el otro es el Paseo de la Costa en el Puerto de la Cruz, concebidos para que sean más accesibles y para que estén integrados en el entorno. 

Además, los fundadores del Grupo Aranea de Alicante, Francisco Leiva y Marta García, propusieron un viaje por varios proyectos desarrollados en la Península. Entre ellos, el Valle Trenzado en Elche para humanizar las infraestructuras que en su día dividieron la ciudad y el Corredor Litoral de Alicante que apuesta por recuperar la identidad de una costa maltratada, sin construir sino es necesario, sino más bien deconstruir.  Este Grupo ganó el pasado mes un concurso internacional de ideas del frente litoral de Alicante y ha sido merecedor de múltiples premios nacionales e internacionales.