UxGC solicita la construcción de un gran hospital para ancianos
El Presidente de Unidos por Gran Canaria, Lucas Bravo de Laguna, considera imprescindible la construcción de un gran hospital geriátrico en Gran Canaria, señala que llevamos décadas dando la espalda a una realidad demográfica marcada por el envejecimiento de la población, y en la isla de Gran Canaria casi el 15% de sus habitantes tiene más de 70 años, y las personas mayores son más vulnerables a las enfermedades, por lo que son visitantes habituales de los servicios de Urgencias.
En Unidos por Gran Canaria no se entiende que, pese a las múltiples denuncias de profesionales, pacientes y medios de comunicación de una triste realidad que llevamos décadas sufriendo, la desgarradora imagen de nuestros mayores en camillas en los pasillos de los dos hospitales públicos, con la mirada perdida en unos casos, quejándose de dolor o incomodidad en otros, no se haya adoptado ninguna medida para solucionar este escenario que forma parte de un legado de vergüenza del que nuestras instituciones deben desprenderse.
Considera el dirigente grancanario que el Gobierno de Canarias tiene una doble obligación, la primera con nuestros mayores, “una sociedad que no respeta a sus ancianos carece de memoria y renuncia a su futuro, porque, como se instaure el pensamiento de que, cuando seamos ancianos, nos van a olvidar, ¿con qué motivación vamos a aportar algo a esa sociedad predestinada a despreciarnos?”, y la segunda con la atención sanitaria digna a todos los ciudadanos, y, con los pasillos de los hospitales colapsados por camillas, es imposible prestar un buen servicio.
Este hospital supondría también la creación de unos 2.000 puestos de trabajo, entre profesionales sanitarios, de mantenimiento y administración, y, en este sentido, el presidente de la formación grancanaria ha lamentado la situación de todo el personal que se encuentra en situación de interinidad, y responsabiliza a los diferentes gobiernos que hemos tenido por no haber convocado las oposiciones pertinentes, “podemos entender a quienes manifiestan que, para acceder a un puesto de trabajo indefinido en la Administración, debe pasarse una oposición, pero tampoco es lícito que los gobiernos no se apliquen las mismas exigencias que imponen a las empresas privadas”.
En cuanto a la ubicación del futuro hospital, desde Unidos por Gran Canaria se apunta a la Casa del Niño como el enclave apropiado, es un edificio que está en situación de abandono desde hace muchos años y, con las reformas pertinentes, sería perfecto para albergar un hospital, además de estar a pocos metros del Complejo Hospitalario Universitario Insular - Materno Infantil, por los que podría servirse del apoyo logístico de este hospital para aquellos servicios con los que no cuente el nuevo centro. En este sentido, Lucas Bravo de Laguna ha puntualizado que es conocedor de la dificultad jurídica que conlleva la conversión del edificio en un hospital geriátrico, dado que el uso establecido en el momento de su creación era el de atención a niños en situación de desamparo, pero confía en que la buena voluntad de las instituciones implicadas, en pos de cubrir una necesidad acuciante de nuestra sociedad, derive en la materialización de este proyecto imprescindible para la isla de Gran Canaria.
Finalmente, el Presidente de Unidos por Gran Canaria ha adelantado que habrá más demandas en esta línea, ya que su partido cuenta entre sus afiliados con muchos profesionales sanitarios que reivindican muchas mejoras en materia de salud, como la modernización de mobiliario, la atención al pago de proveedores y la adquisición de equipos como, por ejemplo, la adquisición de un exoesqueleto para la Unidad de Lesionados Medulares del Hospital Insular, un elemento imprescindible para conseguir que muchas personas vuelvan a andar. Señala, en este caso concreto, que según le informa la Comisión de Sanidad de Unidos por Gran Canaria, esa unidad cuenta con médicos de mucho prestigio a nivel nacional y un equipo de profesionales que bien querría para sí cualquier hospital de España, porque hacen milagros, y no es de recibo que no tengan ninguno de los aparatos con los que cuenta cualquier centro privado.